El Contador

El Contador

El Contador

23 Mar, 2011

El Contador

I. A pesar de los infructuosos esfuerzos de la Secretaría de Hacienda por seguir aplazándola, hoy se dictaminará la iniciativa de la Ley de Banca de Desarrollo. Será el secretario de la Comisión de Hacienda, el priista David Penchyna, quien la presente. Existen muchas posibilidades de que pase por mayoría. Y es que el tricolor ya tiene de su lado al Verde Ecologista y tal vez sume al PT, con lo que arrollaría los nueve votos del PAN. El dictamen caerá como cubetazo de agua helada a los muchachos de Ernesto Cordero, que desde la semana pasada le mandaron decir a Penchyna que la aguantara un poco más. El emisario fue el diputado albiazul Alberto Becerra, quien preside la misma comisión hacendaria.

II. Por la tarde de hoy, los representantes de las cuatro cúpulas de la industria automotriz se van a entrevistar con Bruno Ferrari. Le quieren pedir al secretario de Economía que reactive el Consejo Automotor que se creó hace un año. Este órgano fue bien aprovechado por su antecesor, Gerardo Ruiz Mateos, quien le dio un buen impulso al sector. Sin embargo, cayó en un impasse y ahora se pretende revivirlo para trabajar en su seno diversos temas que son prioritarios. Participarán en el encuentro Carlos García Fernández por la ANPACT, Agustín Ríos por la INA, Eduardo Solís por la AMIA y Guillermo Prieto, que recién asumió la AMDA.

III. Las próximas dos semanas serán decisivas para Su Casita. En ese tiempo los tenedores de certificados bursátiles tendrán que aceptar o rechazar la oferta que la intermediaria les lanzó la semana pasada, a fin de sustituir el viejo bono por uno nuevo de dos mil 499 millones de pesos. Si los inversionistas, en su mayoría personas físicas que apostaron todo su patrimonio a esta hipotecaria, consideran que la recuperación no es atractiva, pondrían al borde del Concurso Mercantil a esta empresa que preside José Manuel Agudo. De transitar a ese escenario Su Casita estaría a un paso de la quiebra. Ya no tiene ni tiempo ni liquidez.

IV. En el mundillo financiero se empieza a cuestionar la experiencia de Javier Creel Moreno como proveedor de créditos de nómina. Más aún, cómo su empresa Crediamigo se hizo de la clave del ISSSTE para acceder a las centenas de burócratas que laboran para ese organismo. ¿Será que su tío, Santiago Creel Miranda, se la puso en bandeja cuando era secretario de Gobernación? Son preguntas que nadie atina a responder.