La última oferta de MVS

Desde 2009, el gobierno federal tuvo nueve propuestas económicas y técnicas con MVS.

La intención: que la empresa presidida por Joaquín Vargas sí se pudiera quedar con 120 MHz de los 190 MHz que conforman la banda de 2.5.

Al final, siempre fue el precio el tema de ruptura. La oferta de MVS fue ínfima respecto de la valuación realizada por el gobierno, y conste que el gobierno les ofrecía la banda a menos de la mitad que habían pagado otros operadores por espectro en la Licitación 20 y 21.

Gobierno la valuó a la mitad de Licitación 21

La propuesta final para MVS fue quedarse con 120 MHz y devolver los otros 70 MHz.

Era bastante buena para la empresa. MVS y sus socios se quedarían con la mayoría de la banda de 2.5 GHz.

Por los 120 MHz, MVS y sus socios pagarían 13 mil 400 millones de pesos, un precio muy bajo, con el cual ya de por sí el gobierno podría tener problemas con los nuevos concesionarios de licitaciones que pagaron más del doble por el espectro en las licitaciones 20 y 21.

MVS ofertó tan bajo que rompió la negociación

Aun así el gobierno se animó al precio bajo para sacar adelante el tema de la banda de 2.5 GHz y dejar una banda para internet móvil de banda ancha lista. Sin embargo, el bajísimo precio ofertado por MVS por los 120 MHz no dejaba lugar a ninguna negociación.

De 13 mil 400 millones de pesos valuados por el gobierno, MVS sólo quería dar 51 millones de pesos. No había ni siquiera la disposición de acercar una postura económica consistente a la valuación gubernamental.

Los secretarios y subsecretarios de SCT y Hacienda lo dicen abiertamente: no podíamos malbaratar de manera tan fuerte un bien que la nación está dando en concesión ¿Se imagina cómo les hubiera ido por hacerlo?

Propuesta de MVS de consorcio cayó bien

Al último, la propuesta de MVS de crear un consorcio sí fue considerada viable.

Era la forma de evitar que una sola empresa se quedase con tanto espectro, y así también se evitaba crear un monopolio en banda ancha, que era la preocupación de Dionisio Pérez-Jácome y Héctor Olavarría, secretario y subsecretario de Comunicaciones, respectivamente.

El consorcio podría ser integrado por MVS, pero también su socio tecnológico de Estados Unidos, Clearwire, así como Intel y Alestra.

Hacienda-SCT buscaron alternativas

El precio que quería pagar MVS siempre fue el problema.

Hacienda, para obtener el precio de la banda, revisó experiencias internacionales y licitaciones de espectro nacionales.

Tanto José Antonio Meade como José Antonio González, secretario de Hacienda y subsecretario de Ingresos, respectivamente, pusieron sobre la mesa toda clase de alternativas.

Al final, la dupla Hacienda-SCT buscó el mejor precio posible de una banda que hoy en día cuesta mucho, al grado de darlo a la mitad de precio de lo licitado en México.

La bajísima oferta propuesta por MVS no dejó lugar a más negociaciones por un bien valuado por el gobierno, no en EU, sino aquí en México bajo experiencias nacionales.

Y ahora vemos el proceso del rescate de la banda de 2.5 GHz, tras años de estar negociando la forma en que MVS podía quedarse con su mayoría.

Gana Supervía de Ebrard a amparo

Es un triunfo para las obras viales y de paso para los casos de interés público, es decir, de beneficio colectivo. Y la Supervía es un ejemplo.

El Juez Segundo de Distrito en Materia Administrativa consideró que la Supervía, la que va de Periférico a San Jerónimo, es una obra de orden público.

Por ser de interés público, el juez niega el amparo interpuesto al Frente Amplio, el cual quería suspender las obras de la Supervía.

El Frente Amplio aprovechaba un cambio en el título de concesión y la ampliación de dos kilómetros, para ir en contra de la Supervía.

Sin embargo, el juez midió bien el tema: es una obra vial de interés colectivo y por lo tanto, de interés público. Así rechaza suspender las obras.

Las construcción de la Supervía seguirá en el DF, e incluso es el segundo amparo que gana en menos de dos años.

Sobra decir que el equipo del gobierno capitalino de Marcelo Ebrard está más que satisfecho y busca terminar su administración concluyendo dicha vialidad.