José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

22 Nov, 2012

Licitación de TV abierta, complicada

La convocatoria y bases de licitación de espectro radioeléctrico para televisión abierta deberían estar, en principio, listas para antes de concluir este sexenio.

En menos de dos semanas deberían estar publicadas dichas bases. Sin embargo, hay retrasos por las distintas autoridades. Todo hace suponer que el proceso se posterga.

Televisa y TV Azteca, interesados en buen proceso

En este caso, tanto Televisa (Emilio Azcárraga) como TV Azteca (Ricardo Salinas) están interesados en un buen resultado de todo el proceso de apertura.

Les conviene para mantener su alianza en telecomunicaciones a través de Iusacell, pues además en el caso de Televisa ya ha estado invirtiendo hasta llegar a más de mil 500 millones de dólares para la nueva red de Iusacell.

El presidente de la Comisión Federal de Competencia, Eduardo Pérez Motta, ha recordado que una condicionante para aceptar la alianza de Televisa y TV Azteca en Iusacell, fue sacar con éxito el proceso de licitación.

De llegar junio de 2014 sin éxito en la licitación de TV abierta, la alianza en la empresa de telecomunicación deberá deshacerse. Fue la condición que impuso la Comisión Federal de Competencia para aceptar la asociación Televisa-TV Azteca.

No ha salido licitación de radio digital

La fecha para sacar adelante la convocatoria y bases de licitación para antes de concluir el sexenio parece que no logrará llevarse adelante.

El problema es que no hay casos parecidos de dónde tomar experiencias. Para muchos el mejor caso para llevar adelante la licitación es el de la radio digital.

Se espera que pronto estén listas las bases para licitar 17 concesiones en el sureste del país y a partir de allí se puedan ver condiciones administrativas y judiciales, para sacar unas bases de licitación creíbles y que no vayan a caer en el mal del sector de telecomunicaciones: la judicialización y el montón de amparos.

El problema es que la licitación de radio digital en el sureste del país no ha salido adelante.

Pérez Motta: maximizar y ver interés público

Pérez Motta recordó que las bases de licitación y convocatoria pueden sacarse adelante lo antes posible, tomando en cuenta la maximización económica del espectro, por ser un tema de interés público.

También recordó que ni la Cofetel ni la CFC deben quedar bien con nadie, sino con el interés público. Y por último, que sí hay un plazo fatal para Televisa-TV Azteca en su fusión en Iusacell, ya que del éxito de la licitación depende su alianza en telecomunicaciones a través de la compañía Iusacell.

El problema, en autoridades

En esta ocasión todo hace indicar que el problema son las autoridades que no se ponen de acuerdo, desde Hacienda, pasando por SCT y desde luego Función Pública, así como con la Cofetel y la CFC.

Debemos decirlo: no ha sido un problema de las televisoras, las cuales no han interpuesto ningún medio judicial para obstaculizar el proceso de apertura.

Por segundo día, posponen decodificadores

Allí están los problemas. Por segundo día consecutivo la Cofetel tuvo que posponer su decisión sobre el ganador de los decodificadores para el apagón digital de Tijuana.

Y todo por una consulta realizada a la Secretaría de la Función Pública, la cual,no llega.

Este es el tipo de problemas y falta de comunicación que estamos viendo entre autoridades, pues aunque unas quieran sacar algo, las otras desconocen el tema o sencillamente no le hacen caso.

INEGI y la felicidad del mexicano

El INEGI tomó una buena decisión: seguir la nueva tendencia  de medir el desarrollo económico a través de otros indicadores independientes del PIB.

Vaya, el Producto Interno Bruto así como el PIB per cápita miden promedios y el crecimiento. Pero no miden todo el desarrollo económico. De allí que economistas de la talla de Joseph Stiglitz o Amaritya Sean hayan propuestos nuevas mediciones como la actual que está presentando el INEGI, hoy presidido por Eduardo Sojo.

Lo que llama la atención es la satisfacción subjetiva del mexicano, ya que en primer lugar se encuentra su vida familiar, seguido por su autonomía y la salud.

Y el último lugar es la situación económica, así como la situación del país.

Allí es donde tiene fuerza la medición: en diseñar políticas públicas para mejorar la situación económica.

El reto de la próxima administración federal será crecer más, generar más empleos y desde luego mejorar el gasto social.

En la encuesta, con más de diez mil personas entre 18 y 70 años, 47.3% está satisfecho con su vida, 36.1% moderadamente satisfecho, 11.8% poco satisfecho y 4.8% de plano está insatisfecho.

En cuanto a la felicidad (como la mide el INEGI), las valoraciones promedio llegan a ser de 8.4 por ciento.

Aunque usted no lo crea, el mexicano, con todo y estar insatisfecho con su situación económica y país, sí es feliz en una calificación de 8.4% en promedio.