Colegio de Contadores Públicos de México A.C.

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17 Dic, 2012

Contribuyentes, auditores, normatividad y México futuro

C. P. C. Ana Elizabeth Figueroa Esquivel*

He observado últimamente que el tema más tratado en las pláticas entre contribuyentes y profesionales de la contaduría pública es la complejidad de nuestro sistema fiscal mexicano: los requisitos y tipos de comprobantes, las diversas y confusas declaraciones informativas, la solicitud de devoluciones de saldos a favor, los diferentes regímenes tributarios, las tasas aplicables, los beneficios, los subsidios, las leyes, los reglamentos, los criterios normativos, las reglas de resolución miscelánea, lo señalado en la página del SAT, en fin, un sinnúmero de consideraciones que debemos observar para poder cumplir en tiempo y forma con las obligaciones fiscales.

Lo anterior, aunado a las resoluciones tanto de las administraciones jurídicas como de los tribunales fiscales, que resuelven en contra de los particulares objetando argumentos extrafiscales en beneficio del Estado.

Si bien es cierto que es una obligación de los mexicanos el contribuir al gasto público, tanto de la Federación como del Distrito Federal, o del estado y municipio en el que residan, también lo es el hecho de que la propia Constitución política señala que deberá ser en forma proporcional y equitativa, de acuerdo con lo que dispongan las leyes; principios constitucionales que no se cumplen en muchas de las disposiciones fiscales vigentes. Sumado a la complejidad en el cumplimiento de las obligaciones fiscales, al importe que se paga por concepto de impuestos, derechos y aprovechamientos, los contribuyentes deben considerar el costo que implica el administrar y elaborar toda la información que debe proporcionarse periódicamente a la autoridad fiscal (mensual o anualmente).

Todo esto en adición a la posibilidad de caer en errores, precisamente por lo complejo del sistema fiscal, y hacerse acreedor a multas exorbitantes que tienen que cubrirse como sanción a las infracciones cometidas, muchas veces sin dolo por parte de los contribuyentes.

Y cuando por alguna razón la autoridad considera que no se está cumpliendo cabalmente llama a los contribuyentes a sus oficinas para presentarles las diferencias detectadas, de acuerdo con el cotejo de información que efectúan sus sistemas electrónicos.

No es posible que los contribuyentes, quienes aportan al gasto público del país en sus diversos niveles, vivan con esos sentimientos de miedo, que no es necesario en este tiempo; lo importante es que el país produzca, genere empleo y riqueza, y en consecuencia mayores recursos para el Estado.

Qué pasa con los auditores externos de los contribuyentes, es también difícil cumplir con su trabajo, están atrapados entre los clientes y la autoridad, cuando estos primeros no están en posibilidad de realizar su auditoría porque no se les entrega la información en tiempo. Por eso muchos contadores solicitan año con año las prórrogas para la presentación de los dictámenes fiscales, es necesario para llevar a cabo revisiones de mayor calidad en beneficio del propio cliente y de la autoridad también, esta última beneficiándose de la realización de un trabajo profesional y de la recaudación de impuestos omitidos, en su caso, que resultan de estas revisiones.

Y en cuanto a las revisiones de papeles de trabajo que practica la autoridad, la información y/o documentación que requiere está muchas veces fuera de los alcances de auditoría que se establecen con base precisamente en cumplimiento de las normas de auditoría aplicables.

Es importante que la autoridad conozca cómo funcionan los negocios, ya que las situaciones vistas desde afuera son muy distintas. Es importante que las disposiciones fiscales y la realidad vayan de la mano, que los procedimientos para el cumplimiento de obligaciones se simplifiquen radicalmente y seguramente esto conllevará a un incremento en el cumplimiento de las disposiciones fiscales en beneficio de todo el país; es necesario que en este nuevo sexenio diputados, senadores, ejecutivos, agrupaciones y colegios trabajen conjuntamente en pro de un mejor México. Sé que se puede y confío en ello, la sociedad así lo requiere.

Este artículo refleja la opinión del autor y no necesariamente del colegio.
*Integrante de la Comisión de Auditoría Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, A.C. 
relacionespublicas@colegiocpmexico.org.mx

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.