Cuatro sexenios bajo la lupa: Paradigmas

El 1 de diciembre del 2012 no sólo implicó el fin de un sexenio y el inicio de otro, sino que, a semejanza del 2000, implicó una alternancia en el Poder Ejecutivo Federal.

Por ello, resulta interesante contrastar los resultados económicos que tuvieron los dos sexenios del Partido Acción Nacional con los dos últimos sexenios en el poder del Partido Revolucionario Institucional. De esta forma se busca tener un balance, en términos económicos, de la transición democrática que se dio en el país.

En los últimos 12 años en que el PRI estuvo a la cabeza del Ejecutivo federal solo hubo un año de recesión (1995), mientras que en los 12 años del PAN en el poder hubo tres años de recesión (2001,2002 y 2009). Cabe destacar que la contracción económica de 1995 fue provocada por  problemas internos, mientras que las 3 recesiones de los sexenios panistas fueron por problemas externos: en 2001 y 2002 por la crisis de la industria en línea, y en 2009 por la crisis financiera internacional. Además, la caída más profunda del Producto fue en 1995 (-6.23%), mientras que la peor de las tres recesiones panistas fue la de 2009 (con una caída en el Producto de 5.95 por ciento).

En materia de crecimiento económico, se observa que el crecimiento promedio del Producto Interno Bruto (PIB) en los sexenios priistas fue de 3.64%, mientras que en los sexenios panistas fue de 2.13 por ciento. Por su parte, el PIB per cápita creció en promedio 1.88% con el PRI y con el PAN, 1.2 por ciento. Se puede explicar el mejor desempeño de la economía mexicana en los sexenios del PRI por la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, aunado al buen desempeño de la economía de Estados Unidos en la década de los 90. De igual forma, en los 12 años de gobierno del PAN, la economía de Estados Unidos tuvo un mal desempeño, lo que se combinó con el priorizar la estabilidad macroeconómica sobre el crecimiento económico. 

En cuestión de desempleo, de acuerdo a los datos de desempleo urbano, hubo un mejor desempeño con Salinas y Zedillo que con Fox y Calderón. El promedio de la tasa de desempleo entre 1989 y el 2000 fue de 3.5%, mientras que el promedio entre 2001 y 2012 fue de 4.6 por ciento. En los dos periodos se tuvo un incremento importante de la tasa de desempleo, provocado por las crisis del 95 y del 2009, respectivamente. La gran diferencia  fue la recuperación del empleo  en el sexenio de Zedillo, ya que se logró regresar al nivel previo a la crisis.

En contraparte, con Calderón no se logró retornar a los niveles previos a la crisis. La razón principal es que en el sexenio de Zedillo se estaban generando una gran cantidad de empleos en México debido a la instalación de maquiladoras en el Norte del país por el TLCAN. Asimismo, después de la crisis del 2009 la economía mexicana no ha tenido la capacidad suficiente para recuperar los empleos perdidos debido a la crisis. Una posible explicación a esta situación es el estancamiento del coeficiente de inversión de la economía nacional, producto en parte de una política monetaria enfocada de lleno al control de la inflación en México

En cuanto al desempeño fiscal, los gobiernos panistas han obtenido mejores resultados, tanto en nivel de recaudación como en monto del gasto. El promedio de recaudación tributaria en los 12 años del PAN fue de 9.2% del PIB, mientras que en los sexenios del PRI, el promedio de la recaudación fue de 7.9% del PIB. Los ingresos totales en promedio de los gobiernos del PAN fueron de 21.7% del PIB. Por su parte, los de los priistas fueron de 19.6% del PIB. 

La causa de los mayores ingresos tributarios es el diferencial de las tasas impositivas en cada periodo, principalmente en el IVA. También podemos ver que el diferencial entre ingresos petroleros e ingresos tributarios es diferente. Hay una mayor brecha en los ingresos totales, la cual es explicada por el alza en los precios del petróleo que aumentó los ingresos totales del Estado.

Estos ingresos más altos han permitido tener un mayor gasto en los sexenios del PAN, siendo el promedio del gasto en estos 12 años de 22.7% del PIB, comparado con 19.5% en promedio de los del PRI. Esto ocurrió a pesar de que dentro del periodo panista en el poder se aprobó la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, la cual impide generar un déficit por parte del Estado, a no ser que exista un choque severo sobre la economía.

Con esto, se puede sugerir que en los primeros 12 años (1989-2000)  la economía tuvo un ritmo de crecimiento mayor al de los segundos 12 años (2001-2012). En varias cuestiones económicas los dos últimos gobiernos priistas tuvieron mejor desempeño que los dos gobiernos panistas, lo que podría ser un factor importante para que la gente optara por un cambio  de partido en el poder.

El próximo gobierno tiene el reto de impulsar el crecimiento económico en un contexto mundial frágil y con algunos riesgos potenciales. Este crecimiento debe estar sujeto a las reglas ya establecidas de responsabilidad hacendaria y banco central autónomo. Uno de los retos de mayor importancia es disminuir la tasa de desempleo sin aumentar la inflación. Además, se debe de reactivar el sector productivo para poder generar las cadenas de valor que impulsen el crecimiento de la economía. Los retos para la economía mexicana son muchos y en el contexto mundial actual se tienen obstáculos muy importantes para lograrlos.