Este segundo trimestre será crítico; ya lo verá usted

Así terminé la colaboración el martes, aquí en Dinero: “Hoy, dada la propensión que tenemos a tomar el gasto público como la panacea, conviene preguntar lo tantas veces resuelto aquí, allá y acullá: ¿En serio pensamos que el gasto hace crecer sustentablemente la economía? Si la negativa ha sido siempre la respuesta, ¿por qué aferrarnos a lo imposible, a crecer con base en el gasto? ¿Cuándo aprenderemos las lecciones producto de los errores cometidos?”

Si nos atenemos a lo que hemos visto estos últimos tres o cuatro decenios no sólo estos 16 meses, la respuesta parecer ser una sola: ¡Nunca! Veamos algunos ejemplos del rechazo a aprender de nuestros errores que explica, en buena medida, por qué el segundo trimestre será crítico.

Una y otra vez hemos afirmado que el crecimiento del PIB que proyectamos, se concretará porque la economía de Estados Unidos va a crecer y “nos jalará”. Sin embargo, no hemos aprovechado sus periodos de recuperación porque, simple y sencillamente no hemos estado dispuestos a concretar reformas efectivas; éstas, las hemos cambiado por reformitas cosméticas que tanto gustan y seducen a la clase política las cuales, en verdad, para nada sirven. 

Así estamos hoy; mientras Estados Unidos empieza a retomar el crecimiento —así sea lentamente—, nosotros nos enfrascamos en discusiones que habrían tenido sentido allá por los años treinta del siglo pasado. Anteayer, la señora Janet Yellen, presidente de la Fed, señaló en un discurso en Chicago, que la recuperación sostenida va a tardar y nosotros aquí, dando por bueno algo que allá señalan que aún no se concreta.

Otro ejemplo de la renuencia a aprender de nuestros errores, lo vemos en el reciente anuncio de Hacienda y Sagarpa de la creación de dos “algo”; uno, la “Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero”, y el otro, “Fondo de Capitalización e Inversión del Sector Rural”.

¿Qué hará cada uno de ellos? No lo dicen pero, conociendo un poco lo que ha pasado con el crédito al campo desde los años treinta del siglo pasado con el Banco Nacional de Crédito Ejidal (Bandidal) y el Sistema Banrural, lo que harán será repetir el dispendio de miles de millones de pesos, y fortalecer la presencia dañina de “los líderes campesinos” y la corrupción a costa de la miseria de millones.

Lo experiencia en materia de crédito al campo nos ha enseñado cientos de veces, que lo que ha sobrado en ese espacio, es crédito; por el contrario, lo que ha faltado son proyectos viables, técnica, económica y financieramente.

Otro error, por si faltare, es nuestra inclinación a ver el gasto público como la cura de todos nuestros males. En realidad, lo idolatramos no porque genere crecimiento y resuelva problemas, sino porque estimula la corrupción, el dispendio y la ineficiencia donde los corruptos son los únicos beneficiados.

Estos tres errores —entre otros—, están en este segundo trimestre; en consecuencia, la desaceleración va a continuar y los objetivos para estos dos años no serán alcanzados. De concretarse esta eventualidad —lo que es muy probable—, sólo habría dos salidas: recortes al gasto, o continuar con la elevación peligrosa del monto de la deuda pública.

¿Qué hará el gobierno? No comamos ansias, pronto lo sabremos.