Los precios al consumidor hilan cinco meses en mínimos

CIUDAD DE MÉXICO.

Los precios al consumidor en México se ubicaron a tasa anual en 2.52 por ciento en septiembre, lo que se compara favorablemente con 2.59 por ciento del mes anterior.

Con este resultado, la inflación a tasa anual acumula cinco meses consecutivos en niveles mínimos históricos, revelan cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En tanto, los precios al consumidor en su medición mensual se ubicaron en 0.37 por ciento.

En su medición subyacente, considerada un mejor parámetro para medir la evolución de los precios, debido a que elimina de la medición a los bienes y servicios que presentan alta volatilidad, como son los precios y tarifas del sector público y los productos agropecuarios, subió 0.37 por ciento, para alcanzar una tasa anual de 2.38 por ciento.

La inflación se mantuvo en el límite inferior del objetivo del Banco de México, de tres por ciento más/menos un punto porcentual.

En materia de precios al consumidor, México parece ubicarse como la estrella de América Latina, toda vez que las nuevas proyecciones económicas del FMI prevén que los precios en el país cerrarán el año en 2.8%, mientras que para Venezuela se estima en 159% y para Brasil, 8.9 por ciento.

DEPRECIACIÓN

Economistas de Banamex destacaron que en septiembre fueron más evidentes algunos indicios del traspaso de la depreciación cambiaria, “los precios de las mercancías de alimentos observaron un incremento de 0.61 por ciento mensual, lo que implicó una aceleración de su tasa anual de 2.59 por ciento en agosto a 2.78 por ciento en septiembre”.

Luis Armando Jaramillo-Mosqueira, economista senior de Scotiabank, coincidió en que “a diferencia de meses anteriores, la inflación en septiembre responde a un incremento mayor al esperado en el componente subyacente, específicamente en mercancías no alimenticias”.

Débora Luna, subdirectora de Estrategia de Mercado de Finamex Casa de Bolsa, expresó que “la inflación de septiembre sorprende a la baja y registra un nuevo mínimo histórico, poniendo al Banco de México en una cómoda posición para esperar a la Reserva Federal”.