Mexicanos crean árboles artificiales que podrían salvarnos de la contingencia

Ciudad de México.- En el tercer día del Campus Party 2016, me encontré con uno de los proyectos más interesantes que vi durante mi estancia en Guadalajara. 

Se trata de árboles artificiales, así como lo lees. Árboles que no tienen hojas ni raíces (más bien parecen una fuente), pero que son útiles para remover del aire las cantidades excedentes de CO2. 

Estos nuevos árboles sintéticos, llamados Urban Tree, podrían ayudar a mitigar los altos niveles de contaminación por CO2 en México de forma rápida y segura, afirman sus creadores.

¿Cómo funcionan?

Para lograr limpiar el aire, los inventores utilizaron microorganismos que hacen la misma función que los árboles. Estos microorganismos fueron  “empaquetados” en esferas y colocados en una pecera.  Luego de armar la estructura, el flujo de aire entra, se limpian las partículas del mismo y se desecha  el CO2. 

Las esferas están fabricadas de un polímero con alto grado de carbono para que el CO2 pueda afianzarse en el material. 

El precio de la estructura es de $35,000 con tres años de vida útil. Ellos ofrecen el mantenimiento que significa recuperar el microorganismo, tratarlo porque se “muere” y ponen otro nuevo. 

El agua, que hace parecer al Urban Tree como fuente, sirve para que el microorganismo se mantenga vivo. Necesita 40 litros de H2O para mantener vivos a los microorganismos que no se tienen que cambiar.   

Un Urban Tree genera el oxígeno de cuatro hectáreas de árboles.

En resumidas cuentas, entra el aire por un sistema de purificación electroestática, que pasa a un sistema biológico que tiene microorganismos que convierten el CO2 en oxígeno y sale purificado.

¿Quién creó Urban Tree?

Chavos mexicanos originarios de Jalapa y Cholula Veracruz . 

Todos teníamos en común que queríamos hacer algo con el ambiente. Investigamos y descubrimos que la contaminación del aire era el principal problema. Se nos ocurrió crear un invento que haga lo que hacen los árboles, fotosíntesis, y por medio de ésta, quitar el CO2 que hay en el medio ambiente”, me explicó uno de ellos. 

El equipo está conformado por:

Carlos Monroy quien es biólogo, Diego Adrián Péres, quien es agrónomo, Juan Gonzáles, es gestor empresarial y Paulina, quien es la encargada de marketing. Todos con 26 y 27 años de edad.  

Así que si dudas que hay talento en México, vale la pena conocer este proyecto de chavos que sin tenmor alguno se lanzaron a emprender. ¡Bravo!