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CIUDAD DE MÉXICO.- El gasto realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) para el levantamiento del Módulo de Condiciones Socioeconómicas, con costo de de 154 millones de pesos, no será aprovechado debido a que, tanto el INEGI como el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), confirmaron que no publicarán el indicador correspondiente al año pasado.
Ayer, en un comunicado conjunto, el Inegi y el Coneval explicaron que su decisión se debe a las condiciones actuales “de no comparabilidad” del Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) 2015 con años anteriores.
El MCS, instrumento para caracterizar aspectos socioeconómicos, incluido el ingreso de las familias mexicanas, fue encargado por la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) para darle sustento al reparto de casi 70,000 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para Infraestructura Social, de los cuales no se sabrá su distribución.
Excélsior informó el lunes que con base en datos del Inegi y la metodología del Coneval 36.7% de los mexicanos estaba en pobreza multidimensional en 2015.
Colaboración
El Coneval e INEGI anunciaron que establecerán un grupo técnico de trabajo que revise los detalles del MCS-2015, esfuerzo al que se sumará la Comisión Económica para América Latina, lo que se informó de manera posterior.
En un comunicado conjunto explicaron que ese grupo evaluará la posibilidad de poner a disposición del Coneval un instrumento comparable entre 2015 y los años anteriores, con el objetivo de contar con la evolución histórica de la medición de la pobreza.
Esos trabajos serán informados oportunamente a la opinión pública, ya que es fundamental transparentar las acciones a seguir para lograr certidumbre en la información que generan ambas instituciones técnicas”, señalaron.
El MCS es un instrumento para caracterizar aspectos socioeconómicos, incluido el ingreso de las familias mexicanas.
Las cifras sobre pobreza que debía publicar el Coneval el próximo viernes servirían de sustento para el reparto del Fondo de Aportaciones a la Infraestructura Social (FAIS), por más de 70 mil millones de pesos, recursos que ahora quedan en el limbo.
Para que éste fuera repartido con cifras actualizadas, la Conferencia Nacional de Gobernadores pidió a la Sedesol la elaboración del MCS 2015.
Esa institución se lo encargó al Coneval, mismo que pagó al Inegi 154 millones de pesos para realizarlo, aunque ahora sus resultados son inutilizables.
Cuatro entidades federativas del país presentan una situación de pobreza extrema tal, que llevan al alza al promedio nacional en este indicador.
Se trata de Chiapas, con 25.3% de su población, seguida de Oaxaca con 19.0%, Guerrero con 17.9% y Veracruz con 10.5%, de acuerdo a estimaciones de
Excélsior a partir de los datos del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y a las que se les aplicó con la metodología del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Cabe recordar que a nivel nacional, la pobreza extrema se ubicó en 5.9% de la población, y que una persona es considerada como pobre extremo cuando su ingreso es inferior al costo de la canasta alimentaria y tiene al menos tres carencias sociales.
Michoacán con 8.6% de su población en pobreza extrema, Hidalgo con 7.3%, Puebla con 7.2% y San Luis Potosí con 6% de su población, son las otras cuatro entidades que se ubican por encima del promedio nacional.
Por otro lado, las entidades federativas con menores niveles de pobreza extrema como porcentaje de su población son la Ciudad de México y Chihuahua, con 0.9% y Nuevo León con 1%.
En valores absolutos, Chiapas con 1.3 millones de personas, Veracruz con 843 mil personas y Oaxaca con 764 mil personas, son las entidades federativas con mayor número de habitantes en pobreza extrema.
El ejercicio estadístico de Excélsior refiere que la proporción de la población con carencias sociales podría haberse reducido en el país.
La población con al menos tres carencias sociales, es decir la que entra en la categoría de ser pobre extremo o es vulnerable de serlo, pasaría de 22.1% a 20.5% de la población entre 2014 y 2015.
Asimismo, la población con al menos una carencia social, es decir aquella que es pobre moderada o es vulnerable de serlo, pasaría de 72.4% a 70.6%.
Esto implicaría que en un año, se redujo en casi dos puntos porcentajes la población con alguna carencia social en país, de acuerdo con los datos disponibles.
DVR
