Bárcena resucita al turismo brasileño

Si alguien dudaba de que el otrora canciller Marcelo Ebrard había puesto poco interés en que se activara la visa electrónica para los brasileños que quieren venir a México, su sucesora, la embajadora Alicia Bárcena, parece haberlo confirmado.

Resulta que desde que Ebrard dejó la Cancillería para participar en la “guerra de corcholatas presidenciales” pasó poco más de un mes para que su sucesora lograra este cambio, que no sólo ha sido demandado por los empresarios del turismo mexicano, sino también por los brasileños.

Entre los muchos que se quejaron por la medida hay que contar a los touroperadores receptivos de México, que se han especializado en ese mercado, donde hay muchos turistas de alto poder adquisitivo.

También los hoteleros de Cancún y la Riviera Maya, quienes reciben a la mayoría de dichos viajeros.

Según Jesús Almaguer, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, 95% de los turistas brasileños llegaban, antes de la imposición de la visa, por el aeropuerto de Cancún para disfrutar de los destinos de sol y playa de Quintana Roo.

Ahora, no sólo los empresarios mexicanos se verán beneficiados por la reactivación de este mercado emisor, sino también el propio gobierno, pues, de acuerdo con Almaguer, entre Impuesto al Valor Agregado, Impuesto Sobre la Renta, Derecho de No Residente, Impuesto al Hospedaje y Derecho de Saneamiento Ambiental, cada brasileño que viene a México paga más de 400 dólares.

Si consideramos que, con base en las cifras de la Unidad de Política Migratoria del Instituto Nacional de Migración, en 2021 llegaron cerca de 300 mil brasileños, entonces generaron ingresos fiscales por casi 120 millones de dólares.

Todavía no se conocen las cifras de 2023, pero, hasta mayo, había una contracción de 45% respecto a los primeros cinco meses de 2022.

De no haberse autorizado la visa electrónica, hablar de una baja de alrededor de 60 millones de dólares en los ingresos fiscales por esta situación no estaría muy lejos de la realidad al cierre de 2023.

La visa electrónica no es sinónimo de que se esté regresando a una situación como la que hubo durante los años en que se eliminó la visa para los brasileños; sin embargo, es un paso relevante, cuyos resultados deberían derivar, de nuevo, en la revocación.

Ahora, el reto inmediato consiste en que los empresarios turísticos, tanto de Brasil como de México, contribuyan a facilitarle la llegada a los brasileños, incluso cuando hagan sus reservaciones a través de las agencias de viaje por internet.

La recuperación será paulatina y difícilmente se alcanzarán pronto las cifras de 2021, no sólo debido a la curva de aprendizaje que implicará el uso de la visa electrónica, sino también por las conocidas razones de que, en el último año, aumentó la competencia turística y de que México carece de recursos públicos para invertir en promoción.

Tanto hoteleros como touroperadores y asociaciones empresariales le están dando públicamente las gracias a la señora Bárcena, pues, en un momento en que la actividad turística internacional hacia México ha dejado de crecer a los ritmos que habíamos visto de 2021 para acá, sin duda, es una buena oportunidad con un país tan grande como Brasil que, además, se encuentra en el top 20 de los que más gastan por turismo a nivel mundial.