Exportadora de Sal, la nueva compra del gobierno de AMLO

El sábado, el gobierno del presidente López Obrador compró, mediante 1,500 millones de pesos, el 49% de Mitsubishi en la empresa Exportadora de Sal (ESSA).

De Iberdrola, Altán y Deer Park

Es una adquisición más del gobierno obradorista, que se viene a sumar a:

-La compra de las 13 plantas de Iberdrola, por 6 mil millones de dólares, y donde la Comisión Federal de Competencia puso como condición tener una administración independiente a la CFE.

-El gobierno obradorista también adquirió Altán Redes, la empresa para dar internet público a poblaciones alejadas. Altán se suma a CFE Telecomunicaciones e Internet para todos. Nafin y Bancomext financiaron, y capitalizaron, por 142 millones de dólares la empresa.

-Y la compra de Deer Park, la planta de refinación en Texas, donde Pemex era socio de 50% y el otro 50% lo tenía Shell. El gobierno mexicano lo compró mediante 600 millones de dólares, y a pesar del monto debemos decir que fue la mejor compra que ha hecho la administración obradorista. Deer Park refina bien, tiene números negros, y está siendo buen negocio.

Se le compra a Mitsubishi por 1,500 mdp

Y ahora el gobierno del presidente López Obrador adquiere Exportadora de Sal, la empresa de Baja California, que es una de las grandes exportadoras de este insumo en el mundo.

Raquel Buenrostro, la secretaría de Economía, que se ha convertido en el brazo derecho del Presidente para estas adquisiciones, recordó que Exportadora de Sal es la séptima mayor exportadora de sal en el mundo.

Desde los años 70, el gobierno mexicano tenía el 51% de la empresa. El 49% lo tenía Mitsubishi.

A Mitsubishi le están comprando su 49% por 1,500 millones de pesos, que saldrán del Fideicomiso Fondo Minero (75%) y del Servicio Geológico Mexicano (25%).

Compras de gobierno ¿son estratégicas?

Exportadora de Sal ¿es una empresa estratégica para expropiarla o nacionalizarla? No necesariamente. En primer lugar aquí se ve una compra, por la participación de Mitsubishi. No se ve ninguna nacionalización ni expropiación. Tampoco se le ve que sea una empresa pilar de industria al interior del país, ni tampoco de seguridad nacional. Eso sí, es una buena compañía y rentable.

Buenrostro comentaba que las sales son un insumo para las industrias farmacéuticas, textil, química, construcción y petroquímica.

Altán e Iberdrola, resultados poco claros

El presidente López Obrador tomó la decisión de readquirir empresas para el gobierno mexicano, las cuales tenían participación privada, u otras que, de plano, eran empresas con las cuales traía mala relación.

Sin embargo los resultados no han sido claros.

En Altán Redes, no se ha podido llevar el internet para todos, teniendo CFE Telecom muchos problemas.

Las plantas de Iberdrola no se van a sumar a la generación de la Comisión Federal de Electricidad, tal y como lo plantearon el Presidente y el director general de CFE, Manuel Bartlett, ya que la Comisión Federal de Competencia lo ve como un problema de competitividad para toda la industria. Deer Park, insistimos, es la única compra gubernamental con sentido económico y números negros, lo cual se contrapone a la construcción de la refinería Dos Bocas, que después de 18 mil millones de dólares, todavía no refina un litro de gasolina comercial.

Y ahora tenemos la compra de Exportadora de Sal.

Pero la duda está ahí: el gobierno mexicano ¿debe comprar empresas, aunque no sean estratégicas? Es el caso de Exportadora de Sal, que sin duda es rentable, pero no estratégica.

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José Yuste | Opinión