Ramírez de la O: compra de Iberdrola no es deuda, pero se pagará en 10 años

La principal preocupación del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, era explicar al mercado que la compra por 6 mil millones de dólares de las 13 plantas de Iberdrola no eran deuda pública. Está más que claro que Ramírez de la O quiere cerrar el sexenio con una relación Deuda/PIB de 49.9%, la más baja de los últimos sexenios.

EL GUARDADITO DEL FONADIN SE USARÁ

Sin embargo, el gobierno tampoco tiene muchos guardaditos. El principal guardadito, ahora sabemos, lo traía el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), que aportará sólo 2,250 millones de dólares.

La aportación del Fonadin le permitirá al gobierno mexicano tener mayoría accionaria en el fideicomiso que compre las plantas.

Sin embargo, el resto del dinero para comprar las plantas lo pondrán inversionistas institucionales, del propio gobierno y, desde luego, la banca privada.

BANCOS PRIVADOS DARÁN EL CRÉDITO MILLONARIO

Los cerca de 4,450 millones de dólares los pondrán bancos de desarrollo, como Banobras, Nafin y Bancomext, pero, desde luego, la banca privada participará con financiamiento.

El interés de bancos como BBVA, Santander, Bank of America, Banorte e Inbursa ha quedado de manifiesto por una nota de Bloomberg.

¿Y cómo no? Las plantas generarán un flujo que garantizará, sin problema, el pago de esas enormes línea de crédito por 10 años.

Hacienda está lanzando a 10 años el pago de los créditos y será hasta ese periodo cuando el gobierno pueda recuperar las plantas.

13 PLANTAS, EL FLUJO HASTA DENTRO DE DIEZ AÑOS

Eso de que no nos va a costar no es tan cierto. Más bien dejaremos de ganar. Las 13 plantas generarán un flujo (ganancias) que se irá a pagar el financiamiento con el cual se costearon. El gobierno no recibirá un peso (ni dólar) por las plantas sino hasta el año 11.

Si bien Ramírez de la O plantea que no es deuda, contablemente tiene razón. Pero, desde luego, para el gobierno mexicano traerá un costo: el de los 2,250 millones de dólares del Fonadin para comprar las plantas y, desde luego, el de dejar de recibir ganancias por esas plantas en diez años. En lo dicho, el ganador fue Iberdrola: ganará vendiendo plantas por 6 mil millones de dólares y mejor entra en otros mercados, como el brasileño, donde invertirá más de 5 mil millones de dólares. Cosas de nuestra extraña política energética.

ANA BOTÍN, POR SEXTA VEZ CON LÓPEZ OBRADOR

Cada vez que hay problemas con el sector privado, como ahora son las iniciativas de Ley Minera y las administrativas, el presidente López Obrador hace una fuga hacia adelante. ¿Cómo? Viendo a las y los grandes empresarios cercanos suyos.

Volvimos a ver a Ana Botín, la banquera española y CEO de Santander, ir a Palacio Nacional. Botín fue acompañada por Laura Díez Barroso, presidenta del Consejo de Santander México, y Felipe García, director de Santander México.

Botín le regaló al Presidente una playera del equipo de futbol Cantabria, precisamente de donde era el abuelo de López Obrador, quien en 2017 visitó aquella región española.

El mensaje de ver a Botín, sin duda, es positivo. Es bueno que el Presidente mexicano vea las inquietudes empresariales, sobre todo de grandes empresarios, como han sido sus allegados Ana Botín, Larry Fink (BlackRock) y, desde luego, Carlos Slim.