CCE en defensa de las rondas petroleras

Debe ser en verdad muy difícil ser dirigente empresarial en la 4T, porque, por un lado, deben defender los intereses de sus agremiados y, por el otro, nadie quiere enfrentarse en forma directa al presidente López Obrador.

La excepción es desde luego Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex a quienes acusan dentro y fuera del CCE de tener interés político por su aguerrida postura.

Uno de los más cautelosos en sus declaraciones es Carlos Salazar, presidente del CCE, pero ayer emitió un comunicado en defensa de las Rondas Petroleras, que tanto critica López Obrador, al anunciar que a mediados de febrero habrá un nuevo acuerdo de inversión con el sector privado ahora en el sector energético.

Las rondas petroleras señala el CCE permiten potenciar la producción y exploración sin que el Estado asuma riesgos ni pérdidas de ningún tipo. Además, fomenta la adquisición o arrendamiento de bienes y servicios, la contratación de mano de obra; aumenta la inversión en infraestructura y se generan procesos de transferencia de tecnología.

Aunque tanto Carlos Salazar como Antonio del Valle, presidente del Consejo Mexicano de Negocios, reiteran su disposición al diálogo con las autoridades, sin rondas petroleras ni farm outs, el nuevo acuerdo de inversión en el sector energético, por decir lo menos, se quedará corto

 
SIN SEGUIMIENTO A ACUERDOS PREVIOS

La duda es si realmente vale la pena que el pleno del CCE siga firmando acuerdos de inversión con López Obrador porque en su primer año de gobierno se firmaron tres y en ningún caso ha habido seguimiento.

En febrero pasado, hace ya casi un año, se anunció la creación del Consejo Nacional para el Fomento a la Inversión, el Empleo y el Crecimiento Económico.

Posteriormente, el 13 de junio, López Obrador firmó con el CCE, el CMN y Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, el convenio para “promover la inversión y el desarrollo incluyente”.

Y a fines de noviembre se firmó lo que, supuestamente, sería un gran plan de infraestructura” con  mil 800 proyectos, y se quedó en otro acuerdo para fomentar la inversión con 140 proyectos la mayoría “reciclados”.

 
CAMBIOS EN HSBC

El año inicia con el pie derecho para Nuno Matos, quien fue reconocido por HSBC por su labor al frente del banco en México que, de acuerdo con Euromoney, fue el mejor banco de transformación en América Latina en 2018 y el mejor banco de México en 2019. Matos, originario de Portugal, se adoptó fácilmente a la cultura mexicana y en los próximos días cuando se anunciará su nuevo cargo en HSBC que, de acuerdo con Bloomberg, será la reestructura global del grupo.

Al frente del banco en México estará a partir del 1º de febrero, Jorge Arce, mexicano, a quien HSBC “se pirateó” de Santander México donde desde 2016 era el director general adjunto de Mercados, Banca Corporativa e Inversión. Anteriormente, de 2011 a 2016 fue director general y presidente de Deutsche Bank México.

Por así decirlo, debutará como director de HSBC en la Convención Bancaria. que se realizará el 12 y 13 de marzo próximo.