AIFA tuvo a Biden y sólo un millón de pasajeros

Las dos decisiones más controvertidas que ha tomado el presidente López Obrador han sido respaldar a López-Gatell y su “estrategia” durante la pandemia y cancelar la construcción del aeropuerto de Texcoco. Hay dos datos: más de seiscientos mil mexicanos fallecidos como consecuencia de covid-19 y más de 400 mil millones de pesos de costo por la cancelación de la obra. En cuanto a lo segundo, el presidente de México obtuvo un triunfo político cuando el Air Force One que trajo a Biden a la X Cumbre de América del Norte, aterrizó en el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA).

MÁS ALLÁ DEL GESTO

Lamentablemente, un gesto político no hace que la obra resuelva los problemas aéreos de la zona urbana de la Ciudad de México, como lo muestran los dichos del general Isidro Pastor Román, quien funge como el director general del AIFA. El militar dijo que este fin de semana el Felipe Ángeles logrará el hito de haber atendido a un millón de pasajeros, lo que estaría logrando antes del 21 de marzo cuando cumplirá su primer año de haber sido inaugurado, para los primeros doce meses esperan cerrar con un volumen de un millón 300 mil pasajeros atendidos. Dicha cifra marca la dimensión del problema del NAIM que, de acuerdo a sus propios objetivos, en el primer año buscaba que se transportaran 2 millones 400 mil pasajeros aunque después lo ajustó a un millón 700 mil.

¿QUÉ ES UN MILLÓN?

Un millón de pasajeros es un fracaso considerando la cifra que ha calculado el primer secretario de Hacienda de esta administración, Carlos Urzúa, que estimó que fueron 331 mil millones de pesos por las indemnizaciones derivadas de la cancelación del Aeropuerto de Texcoco, a lo que hay que sumar 115 mil millones de pesos del AIFA, obvio estas dos cifras no incluyen la pérdida de competitividad por la falta de conectividad, así como en su momento el impacto adverso que tuvo en los tomadores de decisiones lo que afectó la inversión fija bruta. De octubre de 2018 a la fecha la Inversión Fija Bruta acumula una caída de 9.9 por ciento, lo cual sería más de no haber sido por el efecto positivo del “nearshoring” o “friendshoring” como le gusta decir a Trudeau.

COMO OAXACA O MEXICALI

Un millón de pasajeros es equivalente a lo que transportó nada más en diciembre el aeropuerto de Monterrey, por otro lado el objetivo de cerrar el año en un millón 300 mil es similar al volumen de pasajeros del aeropuerto de Mexicali o el de Oaxaca, son 500 mil pasajeros menos que los que transitaron en el aeropuerto de Chihuahua.

¿QUÉ HACER?

Los 446 mil millones de pesos no van a ser recuperados, así que valdría la pena que se trabajara mucho más en la conectividad terrestre del Felipe Ángeles, lo que incluye vías de acceso amplias, que todo tipo de transporte público pueda llegar, como Uber y Didi, así como habilitar y generar incentivos para que las compañías de carga lo utilicen y, obviamente, recuperar la Categoría 1 por parte de la autoridad de aviación civil de Estados Unidos. Culpar a las compañías aéreas nacionales y castigarlas permitiendo el cabotaje es un error. Lamentablemente la fotografía del Air Force One en el AIFA será observada en unos años como símbolo de los tiempos excéntricos que vivía México cuando se rifaban aviones sin rifarlos, los mexicanos del futuro verán la imagen de Biden en el AIFA como ahora vemos las piruetas de José López Portillo en los jardines de Los Pinos.