Espejismo poscovid-19

En cualquier conversación casual, o no tan casual, la percepción es que en unos meses, ya sea por la disminución de casos o la aprobación de la vacuna, se comenzará a normalizar la vida y los modos prepandémicos del consumo regresarán y, por lo tanto, la economía comenzará el lento camino de la recuperación. Sin embargo, podría tratarse de un espejismo por dos razones.

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NUEVA OLA

La primera razón es que Europa puede ser el espejo de México en términos de la dinámica de la pandemia. Nos asoma al futuro y dicho anticipo no se ve nada alentador con 300 mil nuevos casos covid-19 tan sólo la semana pasada.

España, por ejemplo, registró el 15 de septiembre seis mil 329 nuevos casos, lo que implica una tendencia de avance que no se veía desde marzo. Francia registró el 12 de septiembre un nuevo récord de casos diarios con 10 mil 561, aún más que en el peor momento del brote inicial cuando el 31 de marzo había alcanzado el punto más alto con siete mil 578. Reino Unido es otro ejemplo ilustrativo con 3 mil 991 casos, cifra que todavía está lejos del punto más alto, pero aun así muestra una tendencia nuevamente ascendente y el mayor número desde inicios de mayo.

El origen de estos nuevos brotes tendría que ver con los efectos del desconfinamiento, a lo que habrá que sumar los efectos que pueda tener la temporada de frío en el hemisferio norte.

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EL RETO DE LA VACUNA

La segunda razón es que, aunque la vacuna se encuentre lista a finales de noviembre o diciembre, la aplicación será tardada. El director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, Robert Redfield, dijo que aunque la vacuna esté disponible en noviembre o diciembre será hasta finales del segundo trimestre o principios del tercero cuando pueda estar a disposición de la mayor parte de los estadunidenses.

El CEO de Moderna, que es otra de las farmacéuticas que va más adelantada con la vacuna, también mencionó que es muy difícil que se pudiera distribuir la vacuna ampliamente en Estados Unidos a finales del primer trimestre. Lo anterior no es diferente a lo que plantearon los exsecretarios de Salud de México en cuanto a que tenemos que tener como marco de referencia una pandemia que durará, por lo menos, este y el próximo año.

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CONSECUENCIAS ECONÓMICAS

Una crisis tan prolongada dejará consecuencias permanentes en los patrones de consumo, particularmente en la industria de la hospitalidad y los servicios, lo que implica un reto mayor para países como México que tienen un sector turístico potente e intensivo en capital humano.

Reactivarse va a ser muy difícil para el sector restaurantero, las compañías aéreas, gimnasios, entre otros, y deberán reinventar a profundidad sus modelos de negocios utilizando con habilidad la tecnología.

Otro ejemplo es el de las cadenas de tiendas departamentales mexicanas, las cuales necesitan acelerar su servicio en comercio electrónico, lo que implica revisar su estrategia de inventarios porque jugadores como Amazon o Mercadolibre les llevan años luz de ventaja.

El mensaje es claro: será mejor que, aquellos que están esperanzados a que pase la tormenta, empiecen a considerar cómo se pueden adaptar y prosperar en un mundo en donde la tecnología y la distancia son dos constantes que estarán presentes al menos en los que resta de éste y el próximo año.