La autenticidad en tiempos de TikTok

En una sociedad en donde todos aspiran a ser o son ya una marca, la autenticidad es muy valiosa por su escasez. Lo auténtico se convierte en una brisa de aire fresco y un buen ejemplo lo ofrece Nathan Apodaca que, sin proponérselo, se convertirá en un estudio de caso de negocios.

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Su historia contiene varias lecciones para las empresas y sus liderazgos. Los elementos que conforman el fenómeno de Nathan Apodaca no parecen guardar relación entre sí: el primer elemento es un hombre estadunidense de 37 años, de padre mexicano y madre nativa americana, trabajador en una planta de papas e impulsor de la cultura de la mariguana. El segundo elemento es una camioneta descompuesta y una patineta que se adicionan a un éxito musical de 1977, a la controvertida red social TikTok y al producto estrella de Ocean Spray, cooperativa fundada en 1930 que se dedica a la producción de arándanos para producir jugo. Todo ello converge en un post en Tiktok desde la cuenta @420doggface208, usuario con el cual se identifica Nathan Apodaca y en la que se le ve patinando junto a la carretera rumbo al trabajo, luego de que se le descompusiera, una vez más, su vieja camioneta.

En el video se puede ver a este hombre que con una mano se va grabando sobre su patineta mientras que con la otra bebe un jugo de arándanos de Ocean Spray. Mientras aparece la pluma tatuada en su cabeza rapada, que representa su herencia nativo-americana, suena Dreams, del grupo Fleetwood Mac. El resultado es magia y autenticidad en su estado más puro viralizado por TikTok.

El video ya suma más de 60 millones de reproducciones, tiene 110 mil “me gusta” y ha provocado que el álbum Rumors, en el que viene la canción Dreams, haya regresado a los primeros diez, además de ser una de las canciones con más reproducciones en Spotify a escala global.

Aún más interesante fue la reacción de Ocean Spray, que nació en el pueblo de Hanson, en Massachusetts, y que hoy integra a 700 productores de arándanos de Florida, Wisconsin y otros estados, así como algunas partes de Canadá y de Chile y que tiene como principales valores a la familia tradicional de varias generaciones. A una empresa muy tradicional le habría repelido ser asociada a un personaje como Nathan, una compañía más pragmática probablemente habría hecho 18 comités y un número similar de focus groups y, finalmente, habría sacado alguna respuesta... pero varios meses después.

En el caso de Ocean Spray, su presidente ejecutivo, Tom Hayes, que tenía menos de un par de meses en el puesto, respondió rápido con un video clon celebrando la frescura de Nathan y a quien, unos días después, le regaló una camioneta nueva llena de jugo de arándanos. Hasta ahora, Ocean Spray dice que es muy pronto para saber el impacto en las ventas generado por el video viral, pero es claro que ha logrado una exposición sin precedentes.

Los cantantes del grupo musical Fleetwood Mac también capitalizaron su reciente popularidad, el candidato a gobernador de Montana hizo su propia versión, Shakira también subió un video similar, más los que falten. Aquí en México, el líder de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, señaló lo sorprendente de la historia.

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Aunque el frenesí de un ambiente viral puede generar mucha confusión, la lección de Nathan, la canción Dreams y Ocean Spray y TikTok muestran que la autenticidad, el talento, los reflejos rápidos y la adaptación siguen siendo elementos constantes del éxito.