Arrogantes, pero pobres

• La inflación se disparó ante la alta cantidad de dinero en la economía y las bajas tasas de interés. La burbuja tenía que desinflarse o tronar.

Sucede con cada burbuja. Con cada terremoto, viene la destrucción de las casas con cimientos frágiles. En Estados Unidos, México y otros países, la pandemia trajo una explosión del consumo con bajas tasas de interés. Para muchos, parecía que el dinero crecía en los árboles. Con esa ficción de dinero vinieron los derrumbes.

A mediados de 2021, cuando el mundo empezaba a reabrirse con la distribución de vacunas para el covid-19, la gente tenía dinero guardado y créditos baratos. Los consumidores estaban desesperados por comprar, gastar y salir. Plataformas como Amazon, Mercado Libre y otras vivieron una bonanza en la pandemia y después de ella. En Estados Unidos y otros países, la gente salió a comprar casas bajo tasas de interés baratas. En ciudades como Miami, Austin, Ciudad de México y otras, el influjo de personas provenientes de otros países y estados trajo un incremento desmedido de los precios y la gentrificación.

Sin embargo, la burbuja de consumo y dinero barato pronto empezó a causar estragos. La inflación se disparó ante la alta cantidad de dinero en la economía y las bajas tasas de interés. La burbuja tenía que desinflarse o tronar.

Primero empezaron los instrumentos ficticios. Mecanismos de inversión de alto riesgo, como las monedas virtuales (bitcoin y otras), de moda durante la bonanza del dinero barato, ahora causan dolores de cabeza y pérdidas de fortunas para aquellos que lo usaron como fuente de riqueza rápida y fácil. En Estados Unidos ha habido casos escandalosos de creación de grandes fortunas basadas en pura ficción. Así como crecieron, rápidamente desaparecieron. Bitcoin y otras monedas virtuales son ahora los apestados del mundo financiero.

También vienen otros derrumbes. El valor y la demanda de los bienes raíces en Estados Unidos está cayendo a grandes pasos. Con las altas tasas, la capacidad de compra de bienes raíces ha caído enormemente. En algunos mercados, del 2022 a ahora, las compras han caído hasta en un 60 por ciento. La corrección de los precios está en camino.

Con ello, el mercado de valores ha tenido mucha volatilidad e incertidumbre. Cualquier estornudo ahora es visto como los inicios de una pulmonía. Una declaración de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de EU, tiene efectos multiplicadores en los mercados y, ahora, en los bancos que no estaban preparados para la tormenta.

El más reciente ejemplo es el Silicon Valley Bank, cuyos depósitos de más de 100 mil mdd están bajo riesgo. El banco, que apostó por el dinero barato, se vio comprometido por el alza de las tasas de interés.

Así, cuando menos se espera, el riesgo alcanza a los más confiados, pero menos preparados. Los arrogantes hoy son los pobres del mañana.

Y México queda en el limbo…

Una recesión en Estados Unidos es un riesgo inminente para nuestro país. La arrogancia con la que se maneja el gasto público y los derroches en proyectos como en Dos Bocas y otros, eventualmente nos alcanzará.

La gran pregunta es si esa arrogancia nos alcanzará pronto. Por lo pronto, este sexenio está perdido en términos económicos.