Seneam: desafíos pendientes

Tras dos años de conflicto entre Víctor Hernández en los Seneam y el Sindicato de Controladores Aéreos, que encabeza Alfredo Covarrubias, llega como “encargado de despacho” un técnico con 43 años de experiencia en aeronavegabilidad y no un político o un capitán, para dirigir el organismo desconcentrado: Ricardo Torres Muela.

El proceso para nombrarlo toma tiempo y la decisión de la SICT, de Jorge Arganis, fue no dejar acéfala esa posición porque resulta clave en estos momentos para aclarar las causas del incidente ocurrido el sábado pasado en el AICM y todos los incidentes, reales o elaborados, de las últimas semanas, sino para ejecutar los acuerdos alcanzados en la reunión que encabezó el secretario de Gobernación, Adán Augusto López.

Más allá del escándalo, le doy pormenores: la reunión fue muy productiva, pues estuvieron los directivos de aerolíneas comerciales nacionales (VivaAerobus, Aeroméxico, Volaris), el secretario de la SICT, Arganis, y el subsecretario Rogelio Jiménez, y los titulares del AICM, Carlos Morán, y del AIFA, René Trujillo.

El primer compromiso fue alcanzar un acuerdo consensuado para permitir el desarrollo “ordenado”, tanto del AICM como del AIFA, y no el atropellón de ajuste de vuelos y saturación de terminales que tiene a todo el mundo vuelto de cabeza.

Se acordó también colaborar de forma más estrecha para lograr optimizar el uso del espacio aéreo metropolitano con los estándares más altos de seguridad, confiabilidad y puntualidad.

Optimizar implica probar en condiciones “de estrés” (con viento, con aterrizajes fallidos, con neblina, etcétera, con mayor número de vuelos por temporada alta o condiciones ambientales complicadas) el nuevo diseño del espacio aéreo.

Finalmente, se destacó la importancia de redoblar los esfuerzos para que nuestro país pueda regresar a Categoría 1 en la FAA y, así, permitir el aumento de vuelos transfronterizos de las aerolíneas nacionales. Fue muy bueno que se involucrara directamente el secretario de Gobernación, no porque sea el titular, sino porque facilitará el tratamiento del tema dándole importancia a la seguridad nacional.

Ahí se trató también la salida de Hernández, quien renunció porque no tenía salida. Eso va a permitir que mejore la relación de trabajo entre las aerolíneas y los Seneam, pues contar con un espacio aéreo ordenado y seguro requiere un esfuerzo de colaboración muy estrecho entre la autoridad (controladores) y los operadores (aerolíneas y tripulaciones).

El tiradero que tendrá que resolver Torres Muela es complicado, porque el primero es de carácter sindical, y el prioritario es atender y mejorar la capacitación de los controladores y escoger a los mejores para atender la Zona Metropolitana de la CDMX, que es la más demandante y compleja.

En cuanto al incidente del sábado, la AFAC, que lleva el general Carlos Rodríguez, es la única responsable, por ley y reglamento (por cierto, reformado el año pasado para llenar todas las lagunas que el equipo de auditoría de la FAA, que degradó la calificación de la agencia a CAT 2, para puntualizar los protocolos de investigación y documentación de incidentes y accidentes en el espacio aéreo), de levantar el acta del incidente, documentarla y señalar responsabilidades. El tema no es sancionar, ésa es segunda derivada. Lo relevante es identificar causas y resolverlas de forma estructural para que no ocurran de nuevo. Corregir es lo relevante.

Los audios muestran que fue el controlador aéreo el que dio la instrucción al avión de Volaris de llegar a cabecera 05, y ahí estuvo sin movimiento por más de 7 minutos otro avión y le dio autorización para subir al aire, cuando se acercaba el otro al que había dado autorización para aterrizar. Ese incidente no es un accidente, pues el piloto que se acercaba tenía el entrenamiento para decidir el turnaround, al no tener la visibilidad clara para estabilizar el equipo y realizar el aterrizaje.

Por ello, la Dirección de Análisis de Accidentes e Incidentes de la AFAC, que encabeza José Armando Constantino Tercero, será la instancia que emita el reporte, y no dudo que aclare que los pilotos actuaron adecuadamente.