La intensidad, de defecto a gran cualidad emprendedora

CIUDAD DE MÉXICO.- Las personas exitosas reciben decenas o centenares de propuestas diarias, desde invitaciones a ser speakers, mentores, inversionistas, panelistas entre muchas más, y saben que su activo más grande es el tiempo. Por eso tienen que ser tan selectivos cuando decidan donde “invertir” su energía y declinan la gran mayoría. Así, que ¿cómo lograr llamar la atención de alguien e inclinar la balanza a tu favor? La intensidad te puede ayudar.

Cuando hicimos el Unreasonable Weekend, nuestro evento de lanzamiento donde reunimos +50 emprendedores de todo el país para diseñar experimentos que resolvieran problemas específicos de una comunidad marginada durante un fin de semana, sabíamos que el reto más grande era contar con un experto que guiara la metodología de experimentación. Y, ¿quién mejor que el creador de los Google Glass y el coche de Google que se maneja solo? Ese era el sueño, llevar el método con el que se crearon grandes invenciones para resolver problemas en una población desfavorecida.

Conseguimos el mail de Tom Chi, con cuya metodología de prototipado rápido se habían desarrollado estos productos. “Una de las reglas de Tom es que solo contesta cinco mails al día” nos dijeron. Solo cinco mails al día. Así que nos dimos a la tarea de escribirle un mail cada tres días durante casi un mes, cada uno con un título más original que el anterior.

Aquí te van unos ejemplos:

          "Por favor Dios que este mail entre a los cinco del día de Tom”.

El séptimo mail lo escribió José, mi socio y en las primeras líneas decía:

          "Tom, una de las características que buscamos en nuestros mentores irrazonables es que sean perseverantes, así que aquí estamos siendo perseverantes contigo…”.

El octavo mail lo contesté, copiando a José y a Tom, abriendo así:

          "Tom, otra de las características que buscamos en ellos es trabajo en equipo, así que aquí estoy yo haciendo trabajo de equipo con José. Porque morimos de ganas de experimentar contigo, llevando tu metodología a una comunidad rural en México…”.

Un día después teníamos un mail de Tom Chi en la bandeja de entrada…

La verdad es que en ese momento no nos importaba si era una orden de restricción en nuestra contra, íbamos a enmarcar ese mail y colgarlo en la oficina. Al abrirlo, vimos que no, Tom estaba genuinamente emocionado de explorar más la idea. Un mes después llegó a México, lo subimos a un camión vestido de cebra junto con 20 emprendedores que reunimos en el DF y lo llevamos a Aguascalientes, mientras daba su taller de prototipado rápido arriba del camión.

70 horas después vimos emprendedores generar empatía con la comunidad (clientes finales) para encontrar las necesidades reales y junto con ellos diseñaron prototipos, como: jardineras colgantes echas con botellas de plástico PET donde podrían cultivar vegetales para hacer salsa y venderla, sin necesidad de demasiada agua o un gran terreno. Y una cama que se replegaba en la pared mientras bajaba dos patas de madera que la convertían en un escritorio. Porque entendieron que los niños no hacían la tarea porque simplemente no tenían una mesa en su casa.

Tom pasó de ignorar ocho correos nuestros a ser uno de los mentores irrazonables más comprometidos, ha venido tres veces a México y hablamos cada 15 días con él. Hoy tiene una empresa cuyo objetivo es desplegar 12 productos y crear 12 empresas en 1 año.

El mentor irrazonable Álvaro Rodríguez, director del Fondo Ignia y Consejero en la Oxford Business School, me dijo en su primer día en el Instituto, “Me invitan a tantos eventos y Consejos que solo considero a los que verdaderamente insisten… ustedes saben insistir”.

(Spoiler alert: En el siguiente post verás cómo nos rechazó la primera vez que lo invitamos con un rotundo y doloroso “no”).

¿Por qué entonces, alguien como Álvaro Rodríguez, que tiene una familia y dirige un fondo de más de cien millones de dólares estaría en “pro” de la intensidad? Creo que hay tres razones increíbles detrás:

1) Los hace sentir especiales

2) Les asegura que no es una invitación aleatoria y que hay una gran convicción de que son ellos a quienes quieres (y no una coincidencia de una búsqueda rápida en Google)

3) Es una forma en que pueden evaluar habilidades como creatividad, estrategia y perseverancia. A final de cuentas quieren poner su talento y energía en donde mayor impacto puedan tener

*livm