Precio del lunch escolar es hasta 31.3% más costoso

El lunch está de regreso, pero ante la elevada inflación, las familias mexicanas están buscando opciones económicas para que sus hijos puedan llevar a la escuela.
Economía -
Manos de un niños sostienen un alimento sándwich sobre un escritorio con plumas.
El lunch está de regreso, pero ante la elevada inflación, las familias mexicanas están buscando opciones económicas para que sus hijos puedan llevar a la escuela. Foto: iStock

El lunch está de regreso, pero ante la elevada inflación, las familias mexicanas están buscando opciones económicas para que sus hijos puedan llevar a la escuela, ya que el menú para la hora del recreo es hasta 31.3% más costoso.

Algunos ingredientes para elaborar el tradicional sándwich se han encarecido hasta en 35.71%.

De acuerdo con los precios promedio que publica el Inegi, el pan Bimbo Blanco en bolsa grande de 680 gramos pasó de los 56.4 pesos a los 61.77 pesos, incremento de 9.52%; en tanto, el jamón Virginia Fud a granel se encareció 35.71%, al pasar de 112 pesos a 152 pesos, y si se trata de llevar torta, el bolillo subió 25%, de dos pesos a 2.50 pesos y el kilo de huevo se encareció 29.5%. Las bebidas también subieron, el agua Bonafont de un litro aumentó 18%, de 11 a 13 pesos.

Cambio de marcas 

Los altos precios han hecho que las familias opten por cambiar de marcas, adquirir productos en clubes de precio y eliminar ingredientes que se salen del presupuesto.

Todo está carísimo. Trato de comprar paquetes grandes para ahorrar un poco, aunque el lunch se repita. De verduras compro la que está más barata. Aguacate, hay veces que no le mando”, dijo Claudia N, consumidora que prefirió guardar el anonimato.

Otros compradores están recurriendo a clubes de precio como Costco, City Club o Sam’s Club, donde se pueden encontrar paquetes grandes de ingredientes como el queso; mientras que, tratándose del agua, llevarla en un envase desde casa es más económico que adquirir presentaciones pequeñas en las tiendas.

Sin embargo, también existen clientes que deciden acudir a tianguis y mercados para comprar una menor cantidad de determinado producto, como 20 pesos de jamón o de queso. Además, cambiar de marcas es cada vez más común entre las familias.

Ahora compro otra marca de pan blanco, porque sale más barata y creo que es de buena calidad, con eso hago los sándwiches”, mencionó Alejandra García, compradora. Para los hogares es fundamental disminuir los desperdicios. “Como mamá aprendí que hay que mandar lo que se come, cada día de la semana mando algo diferente. En vez del paquete enorme de galletas, compro un paquete y le mando dos galletas de postre, fruta de temporada, sándwich, molletes o burrito de huevo”, explicó Carolina Acosta, compradora.

Los básicos 

De acuerdo con Jacobo Rodríguez, analista de Black Wallstreet Capital México, los productos para el lunch son considerados básicos, lo que significa que la gente no puede dejar de adquirirlos, pero sí puede buscar opciones más baratas. 

A pesar de que aumentan los precios de estos productos, la gente los sigue consumiendo, porque son de primera necesidad. Qué pasa. Si comprabas una marca vas a buscar algún sustituto, que sea el mismo producto, pero a un precio menor, esa es la tendencia que se está viendo en los últimos meses, para de alguna manera que no se vean afectados los recursos de los hogares”, expuso. 

Destacó que otra estrategia que están aplicando las familias es dejar de comprar productos que no se consideran necesarios (aguacate, algunas galletas). Respecto de si los precios seguirán altos, Rodríguez adelantó que “la inflación se va a mantener elevada por varios meses”.

Por: Eréndira Espinosa 

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*clm.  

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