Crece el enfrentamiento de AMLO con la IP

La relación entre el presidente López Obrador y el sector privado empeora casi a la misma velocidad a la que crecen los contagios de COVID-19 y se desploman las expectativas económicas, no sólo por el efecto del cierre hasta ahora parcial de la economía, sino por la caída en los precios del crudo y la falta de un plan de contingencia y de estímulos fiscales para los empresarios.

A pesar de que López Obrador ya nos exhortó a no salir de nuestras casas porque “se nos puede caer más la economía”, sigue sin escuchar las propuestas de los empresarios para enfrentar la crisis e insiste en continuar con sus giras

El colmo es que en Baja California calificó como “una lección de democracia” la consulta pública realizada en Mexicali en la que participó menos de 4.0% del electorado y con la que se pretende, ilegalmente, dar marcha atrás a la planta de Constellation Brands, en la que ya se han invertido 900 millones de dólares.

Además, López Obrador visitó el parque eólico La Rumorosa y criticó los aerogeneradores porque “afectan el paisaje natural” y anunció que no dará más permisos a empresas que “afecten en el medio ambiente y generen contaminación visual”.

Las declaraciones de López Obrador sorprendieron al sector privado que, desde junio pasado, negocia con Alfonso
Romo, jefe de Gabinete Económico, y con Rocío Nahle, secretaria de Energía, un paquete de proyectos de infraestructura energética –el cual sí incluye energías renovables como la eólica– y que se mantiene en el limbo.

SAT NO OTORGA PRÓRROGA

El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, se reunió el jueves con Carlos Salazar, presidente del CCE, y aunque se mostró receptivo a las propuestas para enfrentar la crisis, el viernes el SAT anunció que no habrá prórroga en la presentación de la declaración fiscal que vence mañana y que era una de las demandas de los organismos empresariales.

Además de negar la prórroga a personas morales y físicas, lo que más molestó al sector privado fue el comunicado del SAT pues, para justificar su decisión, señaló que “la economía moral” implica que “los pobres, los débiles y los olvidados encuentren protección ante incertidumbres económicas”. Por lo visto, en la “economía moral” se piensa que los incentivos fiscales son neoliberales y benefician sólo a las grandes empresas y el problema es saber qué sucederá con los cientos de miles de trabajadores que no están entre los más pobres del país, pero sí están en riesgo de perder su empleo.

 LOS EMPRESARIOS NO SOMOS SU ENEMIGO.

El Premio Naranja Dulce es para Francisco Cervantes, presidente de la Concamin, por la carta a López Obrador en la que manifiestan que sus declaraciones generan “desánimo” entre los industriales. Reiteran que continuarán buscando el diálogo para enfrentar juntos la crisis económica sanitaria y social porque “los empresarios somos sus aliados, no su enemigo”.

 
BARBOSA: ¿NOSOTROS LOS POBRES?

El Premio Limón Agrio es para el gobernador de Puebla Miguel Barbosa, por su irresponsable declaración de que “nosotros los pobres somos inmunes al coronavirus”. Barbosa quien es adulto mayor, diabético y rico, debería ser el primero en exhortar a los poblanos a cuidarse y permanecer en casa.