David Páramo

Análisis superior

David Páramo

3 Dic, 2013

Anuncian incumplimiento

Es escandaloso que funcionarios del Instituto Federal de Telecomunicaciones ya estén diciendo que el 9 de marzo no cumplirán, entre otras cosas, el estudio de dominancia en el sector al que están obligados constitucionalmente como parte de la reforma que les dio origen.

De acuerdo con versiones públicas de Luis Lucatero, el IFT no podrá cumplir con las obligaciones que tiene porque le hacen falta manos y que en enero más o menos podrán explicar cuáles serán los temas en los que podrán cumplir con sus obligaciones y en cuáles requieren más tiempo.

El cinismo en el instituto que encabeza Gabriel Contreras es tal, que mantiene en esta posición a pesar de que empresas como Axtel y Nextel han exigido públicamente que haya declaraciones sobre dominancia; sin embargo parece que en muy pocas semanas el IFT ha perdido total y absolutamente el rumbo.

Independientemente de que legisladores como Javier Lozano están obteniendo una gran victoria moral, toda vez que en todo momento advirtió que los plazos no eran reales y no se podrían cumplir, es inaceptable el cinismo con el que un instituto autónomo reconoce que no están en posición de cumplir con la obligación para la que fueron contratados.

Pueden tomar cualquier cantidad de pretextos. Que les falta gente, aun cuando a partir del año próximo tendrán todo el presupuesto que solicitaron y que es difícil de explicar, puesto que crecieron 30% en obligaciones, al tomar un área de competencia económica, y se les asignó 300% más que el ejercido este año por la Cofetel y ellos mismos.

Que es un efecto en cascada del incumplimiento constitucional de las reformas reglamentarias a la ley secundaria de las telecomunicaciones. Curiosamente Gabriel Contreras ya dice que sin estas normas la llamada reforma a las telecomunicaciones es algo así como letra muerta. Otra vez descubrió el agua tibia, puesto que hasta los más lerdos saben que las leyes secundarias son las que dan viabilidad a un sector.

Es necesario reconocer que este pretexto puede resultar bastante bueno. Al no contar con leyes secundarias, pues no existe un terreno claro a través del cual se puedan tomar decisiones. Más allá, si los legisladores no cumplieron con su obligación, pues cuando más un organismo autónomo.

Con la muerte que le dio el PRD al Pacto por México, la laguna legal se hace todavía más profunda. De acuerdo con algunas versiones, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes entregó a esta instancia suprainstitucional el proyecto de regulación secundaria, los legisladores pretextaron que había que escuchar más voces para hacer la regulación a pesar de que no han convocado a ningún foro con este fin.

El organizado por Alejandra Barrales se hizo antes del reconocimiento de que se incumpliría el punto y no contó con los senadores miembros de la Comisión de Telecomunicaciones.

La falta de este estudio de dominancia implica, entre otras cosas, contar con un marco a través del cual se establezca no sólo que empresas son dominantes sobre bases firmes, no simples imaginaciones, sino también que tenga reglas claras para disminuir este tipo de prácticas a favor de un sector mucho más competido y en el que puedan participar muchas más empresas a favor de los usuarios de este tipo de servicios.

Impunidad

No hay ningún sistema de sanción por no cumplir con las obligaciones constitucionales; sin embargo, es verdaderamente grave que el próximo lunes se cumplan los 180 días fijados en la reforma constitucional para tener la regulación secundaria.

Cuando se cambiaron las leyes de telecomunicaciones y competencia había un sentido de urgencia. De que se tenía que transformar con gran celeridad al país y que, por lo tanto, era indispensable que se tomaran decisiones.

Se trató de una reforma poco pensada y, por lo tanto, llena de rencores, errores de visión y faltas de estudio. Quizá uno de los primeros ejemplos tiene que ver con el incumplimiento del plazo fijado en la reforma.

El segundo tiene que ver con las reglas de la retransmisión de señales. Los iluminados del Pacto por México, sin ningún estudio previo, si no simples aproximaciones que existen en su cabeza, inventaron que las televisoras que tuvieran una participación superior a 50% de la televisión abierta tendrían que regalar su señal a las televisoras de cable.

El IFT, encabezado por Gabriel Contreras, acaba de “descubrir” que ni el Canal 2 de Televisa cumple con este requisito, ya que está por lo menos cinco puntos porcentuales por debajo de la marca arbitraria. Como es lógico culpan a Cofetel de haber hecho mal las mediciones.

Sin embargo, MVS a través de sus sistema Dish, distribuye todas las señales de Televisa y Televisión Azteca bajo una interpretación bastante inválida de la reforma a las telecomunicaciones. Y no puede ser válida porque no existe una reglamentación secundaria.

Fuera

Una vez que hoy deberá ser votada la reforma política, se despeja el camino para que los legisladores entren a la que, sin duda, es la reforma de mayor alcance: la reforma energética.

Mucho más allá de qué tan cerca estén de un acuerdo los legisladores del PRI y PAN sobre un predictamen de reforma energética, la realidad es que desde que todos los partidos abrieron sus cartas ya era evidente que habría una gran cercanía entre estas dos instituciones políticas: la diferencia entre los primeros es que son más conservadores en la apertura del sector.

Es un hecho que esta es quizá la única de las reformas que si está bien hecha podría cambiar el rostro del país para hacerlo mucho más próspero para una mayor cantidad de personas.

Es inaceptable que el PRD y la secta de Andrés Manuel López Obrador seleccionen la ruta del rompimiento de las negociaciones (como lo hizo Acción Nacional en el tema fiscal) y que los segundos recurran al esquema de la violencia, de la imposición por parte de las minorías.

Mucho peor es que los partidos políticos sigan propalando mentiras. Nadie, absolutamente nadie está proponiendo la privatización de Pemex o CFE (aun cuando sería bastante bueno) ni mucho menos entregar la renta petrolera a empresas privadas y extranjeras.

De lo que se trata es traer al sector energético al siglo XXI, hacerlo mucho más eficiente y productivo. Que genere mayores inversiones y por lo tanto prosperidad.

Si los del PRD piden un referéndum tienen que hacer algo más que juntar firmas, sino dar argumentos reales.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube