Jesús Alberto Cano

Colegio Nacional de Economistas

Jesús Alberto Cano

20 Ene, 2014

¿Perspectivas 2014 para México en un mundo cierto o incierto?

El 2014, como en todos los años anteriores, nos presentará importantes retos a vencer que deberemos enfrentar con políticas internas, discernido como está el contexto que nos impactará del exterior, así como la evolución de nuestra economía, consecuencia de las reformas estructurales recientes.

Todo parece indicar que las reformas implantadas en México durante 2013 terminarán favoreciendo nuestra economía y al empleo, pero todavía debe lograrse la legislación complementaria para conocer qué tanto se dinamizará el mercado interno.

Por su parte, el comportamiento del empleo en nuestro principal socio comercial augura bien para su Producto Interno Bruto (PIB) esperado este año.

El desempleo estadunidense subió —a la par con la caída de su PIB— durante los años de crisis mundial, 2008 y 2009, del aceptable 5%, a inicios del primero, al gravísimo10%, a finales del último, y desde entonces ha seguido una tendencia constante decreciente, llegando a finales de 2013 a 6.7 por ciento.

Evidentemente tuvieron éxito con su política monetaria expansionaria, durante 2012 y 2013, con la inyección de liquidez de su Banco Central por compras de activos en sus mercados financieros.

Lo anterior augura un todavía mayor ritmo de crecimiento económico en ese país, que tanto afecta la evolución de nuestra economía.

El Banco Mundial (BM) estima crecimientos de 3.2% para la economía mundial, 2.8% para Estados Unidos, 1.4% para Japón y entre 3.5 y 4% para México.

Las tasas de interés se verán afectadas por las reducciones de liquidez de los Bancos Centrales de Estados Unidos y Japón para revertir sus inyecciones.

Algunos conocedores de los mercados financieros estiman que los Bonos del Tesoro a diez años pudieran cerrar el año con incrementos en la tasa, quizás llegando a 3.72 por ciento.

Sin embargo, se nos pueden ahora presentar “moros peligrosos en la costa”, por las acciones norteamericanas de secar su economía de la liquidez inyectada, ya que esa liquidez puede ahora resultar excesiva y, por tanto, inflacionaria. Pero una vez lograda esa menor liquidez, será un serio reto para México y los demás países en desarrollo, más avanzados, si el proceso de retiro del estímulo monetario no se efectúa de forma ordenada.

Decía Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda y Crédito Público: “Vamos a tener un año con mejor crecimiento y eso es tal vez lo más importante; por ende, será un factor de impulso para la economía mexicana, pero hay que recordar que en el lado financiero tenemos un reto distinto y puede ser un reto significativo”, al comentar que con su drene, la acción del Banco Central estadunidense afectará la disponibilidad de financiamiento en las economías emergentes.

Eso se vería en las tasas de interés, tanto en pesos como en dólares; por eso, Videgaray confió en “que la acción de la Reserva Federal (Fed) será ordenada, previsible y sin sobresaltos”. Por tanto, ratificó que la meta del PIB para este año se estima en alrededor de 4%, muy superior al crecimiento registrado en 2013. Las cifras oficiales se darán a conocer en las próximas semanas, dijo.

Lo que sí se detecta preocupante es la pobreza y disparidad de ingresos, así como el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos. Esos temas, entre otros, serán analizados en la próxima reunión del Foro Económico Mundial (WEF).

Respecto de la pobreza y disparidad de ingresos, el WEF advirtió que la crónica brecha entre los ingresos de los ciudadanos ricos y pobres, así como los cambios climáticos extremos, son los peligros que pueden causar un “shock” sistémico a escala global en la próxima década.

Por otro lado, durante 2013, el sector vivienda decreció. Ante ello, el titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Jorge Carlos Ramírez Marín, espera que “ocurra ya el concurso mercantil que defina la situación de las grandes vivienderas en crisis: Urbi, Geo y Homex”.

“Necesitan tener una definición que los ubique en cuanto a tamaño, dimensiones y administraciones”, dijo Ramírez Marín, quien añadió: “Son muy importantes para el sector. 2013 fue un año muy difícil, en que se construyeron menos viviendas en el país, pero un año en que muchas empresas ganaron, otras apostaron a seguir construyendo, y ganaron”.

Y reiteró: “No existe una crisis generalizada en el sector”, puesto que hubo empresas de vivienda que crecieron más de 10% y, en general, la industria, si se excluye Urbi, Geo y Homex, produjo 6% de unidades más que en 2012.

* Presidente del Colegio Nacional de Economistas, Federación de Colegios de Economistas, A.C.

Twitter: @acanovelez

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