¿Viene la desaceleración?

El IMEF dio a conocer sus indicadores manufacturero y no manufacturero de junio, con los cuales se lleva el pulso de la economía mexicana y, de plano, tuvo que titular a su resumen ejecutivo, todavía con signos de interrogación, si se trataban de ¿focos rojos? O si ya se trata de una tendencia de desaceleración.

INDICADORES DEL IMEF CAEN

Lo cierto: algo está pasando en la economía mexicana. El indicador IMEF manufacturero cayó 3.9 puntos, para ubicarse en 47.5 en julio.

El indicador IMEF no manufacturero también tropezó fuerte, al bajar tres puntos para ubicarse en 47.8 puntos. Joaquín Gándara, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), nos dice que puede tratarse de un tropezón del mes de junio. Por eso todavía no lo pone como tendencia.

Sin embargo, algún tropiezo estamos teniendo. Recordemos que, ya para marzo, el Inegi al dar a conocer el Indicador Global de la Actividad Económica, que es un comportamiento adelantado de cómo va la economía, también acusaba una caída de 1.2% en marzo, siendo el primer freno que tiene la economía mexicana desde hace nueve meses.

EXPECTATIVAS DE CRECIMIENTO BAJAN A 2.36%

El crecimiento económico ha sido pobre en esta administración.

Apenas hemos alcanzado años con un poco más del 2%. Y por lo visto, este año 2016 no va a ser la excepción: creceremos sólo un poco por arriba del dos por ciento. Basta ver la encuesta levantada por el Banco de México con las principales casas de análisis económico, en la que los especialistas bajaron su expectativa de crecimiento para 2016 de 2.44 a 2.36 por ciento.

Y conste: los especialistas bajaron su pronóstico de expansión, aun antes de conocerse el aumento en las tasas de interés de Banxico que, como bien sabemos, el aumento en tasas de referencia, por poco que sea, sí afecta la actividad económica al encarecer algunos créditos, como los empresariales y los de consumo.

ALZA EN TASAS, DIFÍCIL LA EXPANSIÓN

Nos ha comentado el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, que se trata de un año complicado por el entorno internacional de alta volatilidad.

Y ahora más con la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Aparte, ha estado latente el aumento en tasas de la Reserva Federal de Estados Unidos y la desaceleración de la economía china.

Ante todo ello, la Secretaría de Hacienda y el Banco de México han optado por coordinarse para evitar un choque financiero que ponga en riesgo la estabilidad. Es cierto: la estabilidad va a continuar y la economía mexicana la ha logrado. Sin embargo, seguimos creciendo muy poco.

Y ahora hay varios indicadores que preocupan, como los indicadores del IMEF que hablan de una desaceleración en junio, o el IGAE que en marzo bajó, o la expectativa de los especialistas del Banco de México que reducen su pronóstico de la economía mexicana. Otra vez, acostúmbrese, a crecer poco este año.

IMSS Y EL DÉFICIT

Extraño fue el comunicado del IMSS. Es raro. La Comunicación Social del Instituto Mexicano del Seguro Social es profesional y eficiente, pero en esta ocasión el comunicado decía muy poco del informe financiero que envía el Seguro Social al Congreso.

Mikel Arriola, director del IMSS, ha hecho esfuerzos interesantes por bajar el déficit del IMSS que, como sabemos, enfrenta el déficit de las pensiones y de los gastos de algunos de los seguros médicos.

Quizá en el comunicado intervino la Secretaría de Finanzas que, como bien dicen, zapatero a tus zapatos. Como sea, el comunicado nunca habla del déficit de pensiones ni de cómo vienen los ahorros por compras consolidadas ni de cómo están buscando mejor calidad del servicio con el mismo presupuesto.