IPO’s mexicanas en Nueva York, en puerta

El Fondo de Inversión, representado en México por Luis Cervantes, no deja de poner el foco en empresas con una demostrada capacidad de crecimiento y rentabilidad. La semana pasada anunció su entrada a la empresa que dirige Miguel Khoury con 160 millones de dólares para apoyar la expansión de su red de hospitales y servicios hospitalarios a la población de ingreso medio.

En un país donde hay una cama de hospital por cada mil habitantes, y donde la recién publicada Encuesta Ingreso-Gasto 2022, revela que en más del 50% de los hogares ha aumentado a poco más del 46% el gasto de bolsillo de salud, esta inversión se coloca como reveladora de un sector en expansión acelerada y sin freno.

Esta es la novena inversión de General Atlantic en México, donde destacan Sanfer, Kavak, Clip, Justo, Axo, nombres que esperan desde el año pasado a la apertura de una ventana de oportunidad en el mercado accionario de Estados Unidos para iniciar la ronda de IPO’s de emisoras mexicanas que buscan seguir la senda que abrió la colocación primaria de Vesta, que le representó una inyección de 445 millones de dólares a la inmobiliaria que encabeza Lorenzo Berho Carranza.

Esta colocación muestra la expectativa positiva que tienen los inversionistas globales hacia México, y donde el capital privado ha estado muy activo y, sin dudar, se están enfocando en los mismos sectores donde Vesta tiene rentado su parque inmobiliario y en expansión: automotriz, aeroespacial, de alta tecnología, farmacéutica, electrónica, de alimentos, bebidas y de empaque.

Por cierto, como parte de los festejos del quinto aniversario de BIVA, la empresa que preside Santiago Urquiza y dirige María Ariza realizarán un BIVA Investment Week, junto con la Amexcap, de Liliana Reyes, y un grupo de fondos que son clave para la reapertura del mercado de colocaciones públicas.

 Algo similar hicieron el mes pasado en Londres, porque Kueski, Stori, Konfío, Bitso y Covalto son algunas de las empresas digitales cuyos inversionistas semilla necesitan vender a través de mercados públicos.

De fondos a fondo

#AHMSA… Trascendió que el presidente López Obrador le ha pedido al secretario del Trabajo, Marath Bolaños, un informe detallado del cierre de la planta de Altos Hornos de México por un grupo de bloqueadores afín al senador Napoléon Gómez Urrutia. Esta estrategia parece guiada desde esa maraña de intereses que acabó dejando en manos de Mittal, el corporativo indio que se apoderó de Sicartasa 1 y 2, las siderúrgicas que, junto con AHMSA, se privatizaron en la administración de Carlos Salinas.

El bloqueo de unos 200 mineros imposibilitó el abastecimiento de gas licuado, necesario para mantener la temperatura de la planta coquizadora, por lo cual se puso en enfriamiento.

Aunque desde marzo se anunció el cambio de administración y la entrada del Fondo Argentem (exCaterpillar) con 650 millones de dólares de capital. Sólo que ni éste ni ningún otro fondo le quiere poner dinero malo al bueno, y eso incluye tener claridad sobre el tema de impuestos y deudas públicas (no sólo privadas) de AHMSA y la salida sin retorno de Ancira y su familia. Negociar con el sindicato es tan importante como con el SAT.

El bloqueo se ha justificado en demanda del pago de salarios caídos, pero si la siderúrgica cierra será presa de quienes están al acecho para hacerse de sus activos, particularmente de mineral de hierro y capacidad instalada para manufactura de acero de alta especificación y dimensión, lo que ni Mittal ni Tenaris tienen, y que resultan fundamentales para mejorar su estrategia en el mercado de Norteamérica.

Al Presidente le deberían informar de esto último, pues son intereses corporativos los que le han puesto todas las piedras en el camino a Monclova. México tiene en las plantas de Michoacán y las de Coahuila tres factores a favor: mineral in situ, capacidad de manufactura con red de proveedores locales y posibilidad de incidir en el mercado mundial del acero, algo que ni Baruch ni la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, han puesto sobre la mesa. Es tan estratégicamente clave como el desarrollo de los campos de LithioMx.