Presupuesto sin Acapulco y sin campo; Infamia, la novela de Ciro Murayama

El Presupuesto 2024 fue aprobado por la Cámara de Diputados. Al final, los diputados, sobre todo los de Morena, que seguían los lineamientos de Palacio Nacional, sí tenían margen de maniobra para atender dos problemas nuevos y que se nos vienen encima.

Uno es la reconstrucción de Acapulco. El plan de recuperación presentado por el presidente López Obrador, por 61 mil millones de pesos, es un buen paso. Pero insuficiente. Los análisis de riesgo hablan de la necesidad de entre 200 mil y 300 mil millones de pesos.

¿Había márgenes para un fondo para Acapulco? Sí, desde luego. En lugar de seguir tirando el dinero al barril sin fondo de Pemex, se pudo atender la reconstrucción de Acapulco.

Es cierto que el presidente López Obrador ha dedicado tiempo y propuestas para la reconstrucción del puerto, sobre todo en sus reuniones con empresarios, quienes acordaron tener más de 2 mil cuartos listos para abril, en el Tianguis Turístico. Hablamos de Mundo Imperial (Juan Antonio Hernández), Mayan Palace (Daniel Chávez), Las Brisas (Antonio Cosío) y Calinda (Carlos Slim). Incluso, Slim está llevando maquinaria de su constructora para la limpieza y reconstrucción del puerto. Sin embargo, el apoyo presupuestal del gobierno era indispensable. Hay otro Acapulco, el del 90% del resto de los hoteles que son pequeños y medianos, y donde la mayoría carece de seguros, que es presa de la informalidad y la delincuencia. Tampoco cuenta con dinero para la reconstrucción. Es un Acapulco que está olvidado en el Presupuesto 2024.

El otro problema es la crisis del campo. La sequía del campo la tenemos encima, afectando cultivos de la dieta básica del mexicano, como son el maíz y el frijol. Pero para este tipo de problemas tampoco hubo un fondo en el Presupuesto 2024.

CONTRATACIÓN DE DEUDA POR 1.9 BDP, CON SELLO 4T

Y conste que el Presupuesto 2024 trae la contratación de deuda por 1.9 billones de pesos. De hecho, se presentará un déficit público de 5.4% del PIB para 2024. Es el primer presupuesto donde la austeridad republicana se deja a un lado para dar paso a un año electoral.

En el Presupuesto 2024, los programas del Bienestar, que son con dinero en efectivo, se mantuvieron en 400 mil millones de pesos, dándole especial énfasis al programa estrella, el de adultos mayores, que recibirán 6 mil pesos bimestrales.

Pero también se mantuvo el presupuesto para obras icónicas. Para el Tren Maya se canalizarán 120 mil millones de pesos en 2024, independientemente del mayor costo que ha tenido. Para la refinería en Dos Bocas serían 170 mil millones de pesos. El Presupuesto 2024 es el más controvertido de los presentados por la administración obradorista. Con déficit alto, de 5.4% del PIB, contratación de endeudamiento por 1.9 billones de pesos, sólo preservando obras icónicas y programas de bienestar en año electoral. Y sin atender la recuperación de Acapulco ni la crisis de sequía en el campo.

EL DEBATE ENTRE IZQUIERDA AUTORITARIA Y DEMOCRÁTICA

Infamia es una novela escrita por Ciro Murayama. Editada por Planeta, es la primera novela que escribe el exconsejero del INE. Y debemos decir: vale la pena. Ágil de leer, retrata a los jóvenes de izquierda de los años noventa en México, en las discusiones sobre una izquierda revolucionaria y una izquierda democrática, poniendo como centros los dos polos de activismo de aquel entonces: Nicaragua y Cuba.

Se trata de la generación posterior al 68, donde el debate supera la necesidad de la igualdad. También era por entrar a la vida democrática, a la necesidad de los respetos de minorías, la superación de nacionalismos o la creación de instituciones.

En Infamia se enfrenta a una izquierda autoritaria, que hoy en día sigue permeando en el país. Desde el primer capítulo vemos a los personajes principales, dos jóvenes que sufren la decepción de la corrupción del poder. Novelada, pero con intelectuales referentes, desde Monsiváis hasta Woldenberg, o películas de culto, como Barfly, el bar León, la irrupción electoral de Cuauhtémoc Cárdenas. Vaya, es un buen reflejo de los noventa. A Infamia la lees a gusto, siendo una guía acertada de lugares y discusiones que explican en lo que hemos caído en la actualidad, una izquierda autoritaria con acomodos en el poder que eran impensables hace algunos años.