México, afectado por Thomas Cook

La quiebra de Thomas Cook –no tan sorpresiva ante su elevada deuda de más de 2,000 mdd– tendrá severas repercusiones para la industria turística a nivel mundial, especialmente en Europa y África, pero también en el Caribe, incluido desde luego México porque estamos hablando de uno de los tour operadores más grandes del mundo que tenía más de 600 agencias de viajes, 200 hoteles y una línea aérea con una flota de 118 aviones que transportaba anualmente 20 millones de pasajeros.

Desde luego, el principal país afectado por la quiebra de Thomas Cook, que tenía 178 años operando, es el Reino Unido, porque tras la negativa del gobierno de rescatar la empresa inyectándole 200 millones de euros que requería para seguir operando, ha iniciado el complejo proceso de quiebra y de repatriación de 155 mil turistas británicos que estaban vacacionando en el extranjero.

Aunque los destinos más afectados por el cierre de Thomas Cook son España, Grecia y Turquía, también hay implicaciones para hoteles en la Riviera Maya por cancelaciones de reservaciones.

Thomas Cook no sólo fue víctima de su elevado apalancamiento sino de su incapacidad para enfrentarse a un entorno en que el creciente número de turistas prefiere reservar sus propios vuelos, hoteles y paquetes en internet; de la competencia de Airbnb y otras plataformas, pero también de la depreciación de la libra esterlina por la incertidumbre del Brexit.

Desde luego se han prendido señales de alerta en el sector turístico y en especial de los tour operadores y agencias de viajes ante el reto que implica adaptarse a las nuevas tecnologías y formas de viajar.

 
CLARO MENSAJE DE RAQUEL BUENROSTRO

La industria farmacéutica tanto las extranjeras afiliadas a la AMIIF como los laboratorios mexicanos agrupados en la AMELAF están a la espera de conocer las reglas bajo las cuales se realizará la compra consolidada de medicamentos para 2020, que estará a cargo de Raquel Buenrostro, la poderosa oficial mayor de la Secretaría de Hacienda.

El mensaje que envió Buenrostro con la importación de metotrexato de Francia –a través de la Secretaría de Marina– es muy claro: no se permitirán ni chantajes ni abusos, ni por parte de los laboratorios ni de las distribuidoras, y el gobierno optará por importar, aún sin ahorros, antes que ceder.

Para la compra consolidada 2020 seguramente se repetirá el esquema de separar la compra de la distribución y de generar mayor competencia a nivel regional.

La industria está preocupada por el temor de que se importe de países con los cuales no se tienen firmados acuerdos comerciales y se adquieran medicamentos de dudosa calidad.

Les preocupa también que Cofepris es un cuello de botella, por el rezago en las certificaciones y no tener suficiente tiempo para la fabricación de los medicamentos como fue evidente en la licitación realizada para el 2o. semestre.

Lo que está en juego es la salud de los pacientes y cientos de empleos de las distribuidoras crucificadas por López Obrador en las mañaneras: Dimesa, filial de Laboratorios Pisa, que tenía el monopolio en la producción de metotrexato; Farmacéutica Maypo y Fármacos Especializados.