6 pasos para lograr la vida que quieres aunque odies las finanzas

De finanzas y otros demonios -
Si te propones dedicar una o dos horas, cada semana, a tu educación financiera, en poco tiempo notarás resultados. Flickr CC
Si te propones dedicar una o dos horas, cada semana, a tu educación financiera, en poco tiempo notarás resultados. Flickr CC

Ana reprobó la preparatoria porque no podía con las matemáticas: ni tutores privados, ni cursos de verano, ni amenazas ni castigos lograron que pasara aritmética. Lo que a ella le gustaba era tomar fotos, así que sus papás la metieron a una escuela de fotografía. Ahí se convirtió en una alumna excepcional, hasta que le tocó la materia de matemáticas. Cuando Ana se dio cuenta de que le enseñarían a hacer cálculos para usar el zoom, elegir ángulos y distancias en la imagen, y equilibrar las proporciones de químicos de revelado, puso todo su empeño y sacó diez. Sus padres, asombrados, querían saber por qué. “Porque odio las matemáticas, pero las necesito para hacer lo que amo”.

Las finanzas pueden parecer difíciles o aburridas en un principio; la clave es verlas como tus aliadas para vivir la vida que quieres. Seguro que te será fácil encontrar la relación que existe entre la independencia financiera y tus sueños y metas más entrañables. La correcta administración del dinero te ayudará a disponer del tiempo y recursos necesarios para lograrlos.

La base de las finanzas sanas

¿Cuál es el primer elemento que debes tener para lograr finanzas sanas? La mayoría responderán que dinero, otros dirán que experiencia, y algunos más afirmarán que “fuerza de voluntad” o “habilidad emprendedora”.

En realidad, la base de finanzas sanas es algo mucho más sencillo: PALABRAS. Así es, simples y sencillas palabras y una comprensión clara de su significado. Por ello se califica de “analfabeto financiero” al individuo que desconoce las palabras y conceptos básicos financieros. Un analfabeto financiero no entenderá bien su estado de cuenta de Afore o del banco, no comprenderá qué está firmando cuando pide un crédito hipotecario, ni tendrá sus ahorros en un instrumento de inversión provechoso. Los analfabetos financieros no entienden los productos financieros del mercado ni los contratos que les ponen enfrente, así que prefieren no leerlos que sentirse como tontos consultando un diccionario cada dos líneas. Su falta de dedicación para aprender de finanzas los obliga a trabajar por necesidad mucho más de lo que deberían, dejando a un lado sus aspiraciones.

¿Eres analfabeto financiero?

La empresa Standard & Poor’s realizó una encuesta mundial  en 2014 para detectar los niveles de alfabetismo financiero en 140 países. Evaluó conceptos básicos como interés simple y compuesto, inflación y diversificación de riesgo. Los resultados no son muy alentadores: 68% de los mexicanos son analfabetos financieros. ¿Quieres saber si estás entre ellos? Aquí puedes ver las preguntas del test. Sin embargo, esta prueba es muy básica, y pasarla no garantiza que ya estés del otro lado, sino que al menos tienes un buen punto de partida.

¿Y qué cosas debo aprender sobre finanzas?

Existen conocimientos generales y específicos de tu situación, que deberás conocer para tener finanzas sanas. Entre los que se encuentran:

1. Las reglas básicas de finanzas personales.

2. Optimizar tu desempeño en los cuatro pilares de las finanzas personales: cómo ganar dinero, cómo gastar dinero, cómo invertir el dinero, cómo proteger tu dinero.

3. Pasitos de bebé. ¿Cómo aprendemos el idioma? ¿Acaso le dan a cada bebé una enciclopedia para que empiece a balbucear palabras? Así también, algunos conceptos financieros los podemos ir aprendiendo en la vida diaria. Cuando escuches o leas algo que no comprendas, investiga con alguien o ten a la mano glosarios como este, o este otro. Trata de usar las palabras que has aprendido en tu hablar cotidiano.

4. Una palabra al día. Ponte la meta de leer algo sobre finanzas personales cada día o semana, hasta que encuentres una palabra que no conozcas... así aprenderás vocabulario con contexto. También puedes buscar la palabra primero, usando un glosario o este otro, y luego encontrar ejemplos de su uso.

5. Tienes una cita con tu dinero. Si te propones dedicar una o dos horas, cada semana, a tu educación financiera, en poco tiempo notarás resultados. Existen cursos gratuitos en línea que pueden ayudarte. Puedes consultar artículos donde se enlistan varios, como este. También te recomiendo el curso de la UNAM, el de la Universidad de Carolina, el de Bancomer o este de Banamex. Finalmente, si te interesa un buen curso gratuito sobre inversiones, no te pierdas el de Kuspit.  

6. Pon en duda todo lo que aprendas. Como verás, algunos de los cursos están auspiciados por empresas, y esto nos trae al siguiente punto. Siempre deberás tomar en consideración la fuente de la información que consultas. Puede que un vendedor de seguros te recomiende más productos de los que necesitas, por ejemplo. A veces leo el blog de Altucher, y me gustan sus ideas sobre emprendimiento y educación, pero no sigo la mayoría de sus consejos de inversiones porque su mentalidad es de alto riesgo y pierde todo su dinero a menudo.

En la red y en los libros verás muchas falacias. Las finanzas personales no son una ciencia exacta, y existen muchas opiniones con respecto al mismo tema. Algunos de mis artículos niegan lo publicado por conocidos expertos en finanzas. Por ejemplo, cuando aseguran que hay deudas buenas, cuando yo afirmo lo contrario.  

Lo importante es que tomes en cuenta varios puntos de vista antes de casarte con una idea. Y, sobre todo, que nunca dejes de aprender sobre finanzas personales; pueden ser la base de una existencia fructífera y con propósito, donde, en vez de ser su esclavo, el dinero está al servicio de lo que más te importa en la vida: tu familia, tus amigos, tu salud, tu tiempo libre, tu trabajo, y tu bienestar.

*DR

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.
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