José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

16 May, 2023

Superpeso, ¿podrá sostenerse?

 

Hablamos de un superpeso. Ayer alcanzó a tener una cotización no vista desde el 3 de mayo de 2016. Cotizó en 17.43 pesos por dólar, un nivel impensable para todo el mercado y mucho menos creíble para los que apostaron al dólar, que ha sido mala apuesta en el gobierno lopezobradorista.

El contar con un superpeso, con todo y ser buena noticia, no refleja una fortaleza contundente de la economía mexicana, pues si bien tiene estabilidad financiera y no trae problemas de deuda, tampoco crece ni genera empleos formales.

PESO, EL MÁS LÍQUIDO

Más bien el superpeso refleja una posición de inversionistas internacionales que voltean a ver la moneda mexicana cuando no hay aversión al riesgo. Nuestra moneda es la más líquida de todas las economías emergentes y, si hubiera una aversión al riesgo, también pueden deshacerse de sus posiciones en pesos de manera rápida. La economía mexicana se ve bien desde fuera por no tener problemas de deuda. Habiendo tranquilidad en los mercados y un dólar debilitado, los inversionistas buscan nuevas alternativas con mayor rendimiento. El peso mexicano es la opción por sus buenos rendimientos.

RENDIMIENTO EN PESOS, SOBREPREMIO

El rendimiento de las posiciones en pesos mexicanos es de 6 puntos porcentuales por encima del de Estados Unidos. Recordemos la tasa de referencia del Banco de México, de 11.25%, mientras la de la Reserva Federal mantiene una tasa de 5.25 por ciento. Lo más seguro es que la Fed no vuelva a elevar su tasa de interés y, por lo tanto, el sobrepremio para quien invierte en posiciones en pesos, se mantiene elevado, de más de seis puntos porcentuales.

DÓLARES TAMBIÉN POR REMESAS, IED Y TURISMO

Además, en México hay entrada de dólares, lo cual fortalece el peso mexicano. Oferta y demanda: más dólares, menor es su precio. La entrada de divisas en dólares se da por las exportaciones, sobre todo del T-MEC, donde México logra exportar más de 400 mil millones de dólares, entre manufacturas (automotriz, sobre todo) y productos agrícolas (cerveza, aguacate, etcétera). La entrada de divisas en dólares también se produce por las “benditas remesas”, de las cuales se refiere el presidente López Obrador. Por remesas entra la enorme cantidad de 58 mil millones de dólares, siendo un monto mayor que la entrada por petróleo o turismo.

Y la inversión extranjera directa sigue llegando a buen ritmo de 35 mil millones de dólares en 2022.

DIFÍCIL MANTENERLO EN 17.46 POR DÓLAR

Hay condiciones, de diferencial de tasas y entrada de divisas, que dan como resultado el superpeso. El reto de este nivel de tipo de cambio es mantenerlo. Y ahí es donde no se prevé que pueda permanecer durante meses el nivel de 17.46 pesos por dólar. La inflación va bajando y, por lo tanto, el peso puede ir tomando un mejor poder adquisitivo. Las condiciones del superpeso se refieren a la situación actual de debilidad del dólar. Pero si empieza a sentirse riesgo, como el de una posible recesión, de inmediato los capitales podrán dejar el peso y las demás monedas de economías emergentes.

El superpeso va a durar hasta que haya mayor riesgo. Por lo pronto, permite combatir de mejor manera la inflación: los componentes importados vienen más baratos y no hay presión sobre los costos ni los precios finales. Por eso, el Banco de México va a tratar de mantener ese diferencial de tasas, aunque la gran duda es si lo quiera hacer mayor. No se ve necesario. Hasta el momento, el mercado apuesta más por la manutención del nivel de tasas en México de 11.25 por ciento.

ECONOMÍA: COSTOSO EL ANTIMEXICANISMO DE TEXAS

El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, está en campaña política y ha tomado a México como trampolín político. La bandera es evitar la migración ilegal, pero, con ello, detiene en la frontera a los transportes mexicanos de 8 a 27 horas, originando un problema serio de costos para ambas partes, Texas y México. La Secretaría de Economía, a cargo de Raquel Buenrostro, le recordó a Abbott que México es el principal socio comercial de Texas, con una relación comercial de 231 mil millones de dólares al año. Y le pidió no hacer más acciones retardatarias contra el comercio que dañan a ambas partes. Bien por Economía.

 

 

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