81% de los trabajadores vive con temor de perder su empleo

CIUDAD DE MÉXICO.- Cientos de mexicanos enfrentan grandes desafíos en materia de salud mental. Con la emergencia sanitaria, la depresión, el estrés, las preocupaciones y la ansiedad aumentaron: Valeria Ipiña Victoria, psicóloga.

En México, la pandemia por covid-19 inició hace poco más de un año, en ese lapso de tiempo hemos sido testigos de muchos cambios como: la evolución que las farmacéuticas han tenido al crear las vacunas, el distanciamiento social, las clases en línea, el trabajo en casa (home office), entre muchas otros.

Antes de la pandemia la historia era diferente. En un instante, sus calles lucen abarrotadas por cientos de personas que van a sus trabajos, escuelas, etc. Lo que le da vida a sus aceras es la constante actividad de la gente que transita hacia algún lugar.

Medidas inmediatas en la CDMX

En medio de una crisis sanitaria, la ciudad empezó a verse menos transitada. El gobierno declaró, en el Diario Oficial de la Federación (DOF), las medidas de distnciamiento social.

También definió las actividades que podían realizarse, las cuales dividió en esecnciales y no esenciales.

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Las primeras pudieron mantener el desarrollo de sus actividades en sus espacios laborales y, las segundas tuvieron que interrumpirse o implementar medidas de trabajo en casa a fin de facilitar el confinamiento.

A esto, se sumaron las medidas sanitaria de la Secretaría de Educaión Pública (SEP), la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y la Secretaría de Salud (SALUD), éstas tuvieron un impacto directo en la organización de las familias porque tenían que combinar las actividades escolares a distancia con las laborales.

De un momento a otro la casa se convirtió en el espacio donde las personas pasan el mayor tiempo posible y el lugan en el que realizan sus actividades cotidianas.

Y, es así que las autoridades sanitarias alertaron sobre las afectaciones a la salud mental, por lo que pusieron a disposición de la población líneas telefónicas de atención en caso de sentir, tristeza, enojo o ansiedad.

¿La salud mental debe ser una prioridad?

En entrevista, Valeria Ipiña, licenciada en psicología por la Universidad Mexicana, enfatiza que:

El cierre tan prolongado de actividades no esenciales, de escuelas, negocios, trabajos, etc., es un fenómeno que nunca se habían visto, y no solo han tenido un fuerte impacto económico y educativo, sino que también psicológico.

De acuerdo con la OCDE, el 29% de los empleados en México trabaja 43 horas o más a la semana, esto trae consecuencias, ya que los niveles de estrés aumenta y la salud mental se ve comprometida.

Para la psicóloga, la salud mental es un tema que ha estado olvidado por muchos años, sin embargo, debería ser una prioridad.

Un estudio realizado por la Faculta de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), mostró que:

• 81 por ciento vive con temor de perder su empleo debido a los constantes recortes en la planta laboral o cierre de empresas.
• 87 por ciento se siente mermado en su economía.
• 75 por ciento tuvo una reducción en sus ingresos o tiene familiares que recibieron un recorte mayor a 50 por ciento de su salario.
• En consecuencia, 90 por ciento está intranquilo por los gastos del hogar.
• 63 por ciento de los trabajadores ya está afectado por no ver a sus amigos o seres queridos.
• 44 por ciento de los encuestados reportó tener comunicación con los jefes después del horario laboral.

Para realizar el estudio la UNAM entrevistó a más de cinco mil empleados que hacen home office en todo el país y, forma parte de la investigación “impacto del covid-19 en trabajadores mexicanos”.

Personas que hacen home office, los más afectados

El alargamiento de las medidas de distanciamiento social y el llamado home office han provocado una serie de problemas físicos y emocionales como: depresión, estrés crónico, ansiedad, bipolaridad y el síndrome de desgaste ocupacional

Las principales consecuencias que ha generado la pandemia es el “hartazgo emocional”, es decir, las personas sienten que han perdido la libertad de salir para hacer diversas actividades, como resultado de esto, mucha gente se siente frustrada y enojada, Valeria Ipiña.

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Fernanda Álvarez tiene 30 años. Es secretaria en un despacho de abogados. Busca la forma de sobrellevar la situación: acude a terapias psicológicas.

En general el confinamiento me empezó a deprimir mucho, no me daban ganas de hacer nada, me angustiaba no poder salir a trabajar, me daba miedo que me despidieran. Tuve muchas crisis de ansiedad.

Los padecimientos más frecuentes, incluidos en los trastornos afectivos, son la depresión y la bipolaridad; los segundos, son los ataques de pánico y ansiedad, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y los trastornos de adaptación.

Los trastornos mentales más frecuentes son minimizados por la gente. Se vive un poco el mito de que no son problemas de salud sino que es cuestión de echarle ganas, de debilidad y que hay que fortalecerse, mencionó Valeria Ipiña.

En la actualidad, la sociedad no es la única que le resta importancia a la salud mental. En tiempos de pandemia, las empresas también lo han hecho al implementar medidas poco eficientes durante el home office.

La psicóloga hizo hincapié en que las empresas tomen las medidas necesarias para que la salud mental de sus trabajadores no se afecte, esto sin que el rendimiento laboral dismiuya.

Es necesario dormir y descansar para que la mente se relaje y de esa forma se mitigue el estrés acumulado durante el día laboral, recomendó Valeria Ipiña.

Acción, comunicación, orden y empatía son las recomendaciones que da la psicóloga Ipiña para abordar el malestra psicológico que ha generado el home office durante la crisis sanitaria.

Hay que asumir lo que se siente para tomar medidas al respecto y así evitar una sobredosis de estrés y ansiedad que dañen tu salud mental. Es necesario decir sí, la pandemia me afectó psicológicamente, enfatizó la psicóloga.

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