Glifosato, la batalla jurídica

Aumentan los litigios en contra del gobierno federal no sólo en el ámbito energético contra la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica y, una vez que se promulgue, a la reforma a la Ley de Hidrocarburos, sino también en el sector agropecuario, por el decreto de diciembre de 2020 que reduce la importación de glifosato gradualmente, al igual que el maíz híbrido, hasta prohibirlo en diciembre de 2024.

Esta semana, el juez Sexto de Distrito definirá si otorga a Bayer la suspensión definitiva que presentó Monsanto, principal productor de glifosato en el mundo. Bayer obtuvo ya la suspensión definitiva la semana pasada. Aunque se trata de un amparo de interés jurídico que sólo cubre a la empresa, reviste una gran importancia porque Bayer-Monsanto es el principal productor del herbicida a nivel mundial.

No es, desde luego, el único litigio en contra de este decreto y se espera también que en los próximos días el juez Octavo de Distrito, Martín Adolfo Santos Pérez, otorgue una suspensión provisional al amparo presentado por el Consejo Nacional Agropecuario, que preside Juan Cortina, y que por ser de interés legítimo beneficiaría a todo el sector, pues dejaría sin efectos el decreto.

El glifosato, el herbicida más utilizado en el mundo, es muy polémico porque sus detractores, empezando por el presidente López Obrador, aseguran que tiene impactos negativos en la salud, aunque no se ha podido comprobar en forma fehaciente y tampoco se ha desarrollado en el mundo un sustituto eficiente.

•   REZAGOS EN CONACYT Y SEMARNAT

Aunque supuestamente se reduciría gradualmente la importación de glifosato, los productores de más de 110 cultivos, desde maíz hasta café y trigo, están muy preocupados porque el Conacyt, que obvio no ha desarrollado sustitutos, tiene detenidos los permisos de importación. Lo mismo ocurre con la Semarnat, que sólo ha autorizado el 5% de los permisos solicitados, con un rezago de más de seis meses. Los productores aseguran que, ante la falta de un plaguicida tan eficiente como el glifosato, habrá un incremento en los costos de producción, por la menor rentabilidad, y un aumento en precios, que es lo que buscan desatorar con el amparo.

Hay también ya consecuencias internacionales porque se presentarán controversias en el marco del T-MEC, ya que se consideran barreras no arancelarias al comercio.

•   ZALDÍVAR, INDEFINICIÓN

El Premio Limón Agrio nuevamente es para el presidente del SCJN, Arturo Záldivar, porque pretende lavarse las manos ante el aberrante atentado a la democracia por ampliar su periodo dos años más contra lo que señala la Constitución. Zaldívar dijo primero que esperaría a  la decisión en Diputados y ahora asegura que esperará a que la SCJN decida sobre la prolongación de su mandato. Y aunque reconoce que se tendrá que abstener de participar, no rechaza en forma tajante “el regalito”.

•  COFECE, CONTROVERSIA VS. LEY ELÉCTRICA

El Premio Naranja Dulce es para el Pleno de la Cofece, que preside Jana Palacios. Se manifestó contra la Ley de Hidrocarburos por sus implicaciones negativas para la competencia, que se traducirán en alza en los precios; y presentó una controversia constitucional vs. la Ley de la Industria Eléctrica porque es inconstitucional, elimina las condiciones para la competencia en mercado eléctrico y generará daños al consumidor, a la economía y al medio ambiente.