No hay dinero, pero sí programa

Lo dicho. No hay dinero para impulsar una reactivación más sólida, pero sí una propuesta —en desarrollo— para facilitarla. La reunión entre la Secretaría de Economía, el IMSS y la CCE para definir un modelo de “negocios seguros” podría marcar la diferencia en la normalización económica.

No dejar atrás a ningún negocio, más cuando el sector servicios y comercio representa el 85% de los establecimientos reportados en los censos económicos del 2019, implica la definición de protocolos de atención completos, pero también que el patrón se involucre tanto como el trabajador, en el proceso de vacunación de los trabajadores y sus familias. El otro frente de crecimiento económico está en el comercio exterior y atracción de inversiones, y en recuperar el entendimiento con el sector privado. Algo interesante de la charla, es la utilización de la plataforma que creó el equipo de Alfonso Romo en la Oficina de la Presidencia, no sólo por la presencia de Héctor González como coordinador, sino porque en los 25 cofineces instalados en el país se han identificado proyectos de inversión que no sólo tienen que ver con infraestructura pública, sino también con el establecimiento de empresas, que incluyen además de automotriz, autopartes, aeronáutica, manufactura, agropecuario, siderúrgicas, otras como biosalud, nanotecnología y desarrollo de software 4.0 para industria.

Esos cofineces, dijo, serán instrumento para resolver cuellos de botella, reducir la carga regulatoria y la burocracia. ¡Tendría que revisar lo que no hace la Cofemer!

La Secretaría habla de una nueva política industrial, no dio detalles de la misma ni tampoco de cómo incentivará la innovación, pero sí del mejoramiento sustancial de los corredores de logística y distribución y algunas inversiones en Sinaloa y Nuevo León.

Pero sabe ¿qué es notable?. El foco en la relación México-EU. Que Economía debe decirle al Presidente cuando México no cumpla con las obligaciones contraídas en este instrumento negociado, como la pretension de desaparecer los organismos autónomos constitucionales IFT y la Cofece, porque forman parte de esos compromisos. Lo de Energía se irá con tiento, pero no dude que apegada a derecho y sin meterse en definiciones de política energética. ¡Para qué cubre guardia que no le asignan! ¿Interesante, no?

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DE FONDOS A FONDO

Ventas directas… Más de 17 millones de mujeres podrían perder su trabajo en México debido al impacto económico por la emergencia sanitaria, y en medio de la pandemia dicen que el hambre se junta con las ganas de comer. De acuerdo con el informe de la OIT sobre covid-19, las medidas de contingencia y restricción de la movilidad que han implementado los gobiernos para atender la emergencia sanitaria han afectado alrededor del 81% de la fuerza laboral en el mundo. En México, el sector económico más afectado es el de comercio y servicios, restaurantes y ventas directas donde se emplea al 60% de las mujeres. También en la pandemia, cuando se contrae el ingreso, la disponibilidad de productos con precios accesibles, pero con calidad y garantía de entrega, puede hacer la diferencia. Marcas como Mary Kay, número uno en México en venta directa de productos de belleza y cuidado personal, lanzó una plataforma digital que permiten a las consultoras de belleza acceso y continuidad para mejorar sus ventas, sesiones de planeación y formación desde casa, porque la plataforma permite que cada consultora tenga su página personal. La solución tecnológica es completa, pero al mismo tiempo de fácil adopción. Esto explica que en pandemia crezca.

En México, el mercado de cosméticos y cuidado personal, según la Direct Selling Association es el más relevante para las ventas directas, pues representa 44%; seguido por bienestar con 34%; productos de consumo y duraderos, 13%; y ropa y accesorios, 9 por ciento. En 2019 alcanzó un valor de 91 mil millones de pesos, según la Asociación Mexicana de Venta Directa de Hans Werner.

México es el séptimo país en ventas a nivel mundial y 3 millones 350 mil personas se dedican a la venta directa, 80% son mujeres, y 7 de cada 10 son amas de casa.