Fondo de emergencias: ¿concepto aburrido o cuestión de vida o muerte?

De finanzas y otros demonios -
El fondo de emergencias es el pilar sobre el cual se sostiene el resto de tus finanzas. Sin él, cualquier imprevisto puede sacarte de balance. Foto: Pixabay.
El fondo de emergencias es el pilar sobre el cual se sostiene el resto de tus finanzas. Sin él, cualquier imprevisto puede sacarte de balance. Foto: Pixabay.

Tengo un amigo que después de tres años al fin logró salir de sus deudas por completo. Entonces me hizo LA pregunta: ¿Ya puedo invertir?

La respuesta es sí y no. En el artículo del mes pasado les presenté una pirámide que detalla los pasos necesarios para llegar a la independencia financiera. Mi amigo está cambiando su modo de ver al dinero, ya se liberó de deudas y lo que sigue es algo que suena muuuy aburrido ¡tener un fondo de emergencias!

El fondo de emergencias es el pilar sobre el cual se sostiene el resto de tus finanzas. Sin él, cualquier imprevisto puede sacarte de balance. Por eso la respuesta es no, todavía no puede “invertir”, pero al mismo tiempo es sí, porque su fondo de emergencias es y debe ser ¡una inversión! Ya verás más adelante por qué.

Pero antes, te dejo una liga para suscribirte a mi lista de envío y que no te vuelvas a perder ninguna de mis publicaciones. Al registrarte llegarán automáticamente a tu bandeja de entrada mis artículos nuevos. Puedes darte de baja cuando lo desees. Así que vamos, ¡a darle clic!

https://sendfox.com/monederocondinero

Ahora sí, empecemos viendo por qué tener un fondo de emergencias es un paso que jamás de los jamases te puedes saltar:

1. Te da tranquilidad

No es lo mismo tener que pagar por una reparación costosa en tu coche o casa, una consulta médica imprevista o cualquier otra eventualidad cuando tienes el dinero que cuando no lo tienes. No sé tú, pero a mi cerebro a veces le gusta torturarme advirtiéndome que esto o aquello puede salir mal. Cuando mi mente elige torturarme con algo que se puede resolver con un fondo de emergencias, le gano la partida: ¡Eso no me preocupa, así que déjame en paz! Tener un fondo de emergencias te da tranquilidad todo el tiempo, lo uses o no. Pero especialmente te dará paz cuando llega el momento de utilizarlo. Imagínate estar metido en un problemón. Estás enfermo, chocaste, una pared de tu casa está chorreando agua quién sabe por dónde… pero imagina que además de estar en el hoyo ¡tienes que ver de dónde sacas el dinero para salir de él! Eso sí es mala suerte.

2. Te ahorra dinero

No tener dinero sale caro. No sé si te has asomado a ver los intereses que cobran las tarjetas de crédito hoy en día, están para irse de espaldas. El Costo Anual total o CAT puede ir desde el 44% hasta el 98%. De acuerdo con una encuesta de 2018, casi la mitad de la población no considera el CAT para elegir un crédito, pero es de lo más importante. El CAT te indica el costo total que pagarás en un año por tu crédito. Incluye todo lo que te cobrarán: tasa de interés, comisiones, primas de seguros, IVA, entre otros. Entonces digamos que pides mil pesos de crédito para una refacción de tu coche en una institución que te cobra 50% de CAT. Esto quiere decir que después de un año, si solamente pagas el mínimo y no aportadas nada a pagar la deuda, habrás pagado 500 pesos, y todavía seguirás debiendo los mil pesotes. Pero si contratas en una institución que cobra el 98% de CAT, en un año habrás pagado 980 pesos y todavía deberás los mil. Como verás, en un caso así no tener un fondo te puede salir muy muy caro.

3. Preserva tu reputación y la tranquilidad de los tuyos

Quizás a ti no te preocupa el costo de los créditos porque sientes que algún familiar o amigo podría prestarte dinero en caso de emergencia. Y también consideras que esta persona no te va a cobrar intereses.

Esta es una opción a la que acuden muchas personas, y aunque creo que es mucho mejor que pedir un crédito costoso, la aguafiestas que hay dentro de mí se ve obligada a advertirte que esta estrategia no está libre de costos.

Imagina que necesitas una operación de emergencia que no cubre el seguro. Entonces acudes a familiares y amigos. ¿Cómo te sentirías? Quizás estresado o abochornado. Estos sentimientos son solamente el principio, porque pedir dinero a tus seres queridos puede tener otros costos que no tienen que ver con el dinero.

a) Cuando le pides prestado a alguien, estás poniendo sobre los hombros de esa persona varias inquietudes entre las que podrían estar que se preocupen por ti porque no estás lo suficientemente maduro para valerte por ti mismo, la preocupación de que su relación se deteriore si no te presta y de que su relación se deteriore si no le pagas. Todo esto, por supuesto, depende del contexto. Hay tantos casos como gente en el planeta. Pero tú conoces tu situación mejor que nadie. ¿A estas alturas tus seres queridos podrían esperar que fueras financieramente autosuficiente? Si la respuesta es afirmativa, pedirles un préstamo posiblemente los preocupará. ¿Cuánto tiempo te tomará pagar el préstamo? Si el plazo de pago es largo, el desasosiego que pudieras provocar en tu ser querido podría ser mayor.

b) Quizás algunas de las personas a quienes les pidas un préstamo o que se enteren del préstamo cambiarán la opinión que tienen de ti. Pero esto, igualmente, depende de cada caso. La gente podría tenerte compasión y hasta respeto. “Mira, esa muchacha tan trabajadora, pero le pagan poco y apoya a sus papás. Obviamente no le alcanza”. Pero si tu solicitud de dinero levanta algunas cejas, pregúntate si lo que te falta es cultura financiera y no dinero. ¿Pedir prestado atraerá juicios a tu estilo de vida? Posiblemente algunos cuestionarán tus prioridades si te paseas por ahí con un bolso de diseñador o un celular de veinte mil pesos. Y tendrán razón en cuestionar. Tú deberías cuestionarte también.  El problema es que estos cuestionamientos pueden generar varios efectos indeseados: que la gente no crea que eres una persona responsable, organizada y con sentido común y que, por lo tanto, se abstengan de ofrecerte oportunidades que requieran de estos atributos. También podría ser que se abstengan de prestarte por esta misma razón.

4. Te puede salvar la vida

Aunque no lo creas, tener un fondo de emergencias podría salvarte la vida. Claro que la ausencia de estrés financiero ayudará a tu salud en general: te lo agradecerán sobre todo tu corazón, tu sistema inmunológico y tu mente.

Otra forma en que el fondo de emergencias te puede salvar la vida es dándote la confianza suficiente para acceder a servicios de salud especializados cuando sospechas que algo anda mal. Por ejemplo, una conocida tenía apnea del sueño y se sentía mal. Con su fondo de emergencias decidió pagar los servicios de una clínica del sueño, donde descubrió que la falta de oxígeno por la noche estaba afectando su corazón. Por fortuna, el tratamiento impidió que los daños tuvieran consecuencias a largo plazo.

Otro amigo aprovechó su fondo de emergencias para cambiar varias piezas de seguridad en su auto. Poco después se vio involucrado en un accidente que habría sido fatal con llantas gastadas y frenos poco confiables.

Cómo tener un fondo de emergencias

Digamos que ya te convencí y te mueres por tener un fondo de emergencias. ¿Qué sigue? Te doy tres pasos:

1. Escoge una cifra

La mayoría de los expertos concuerdan en que el monto de tu fondo de emergencias debe ser de entre tres y seis meses de tus gastos. Y no me refiero solamente a tus gastos fijos como servicios y renta, sino también comida, medicamentos y transporte. Debe ser suficiente para pagar los deducibles de tu seguro de auto, de gastos médicos o alguna reparación en tu hogar. Cuando ya tengas tu fondo de emergencias y comiences a invertir, tu fondo podría crecer también. Muchos inversionistas tienen un fondo de entre el 10% y 30% de su portafolio total de inversiones.

2. Organízate

El dinero de tu fondo de emergencias no debe estar mezclado con dinero que estás ahorrando para otras cosas. Debes tener claro que tu fondo de emergencias es para verdaderas emergencias y por ello necesita estar en un lugar separado. Yo no recomiendo tener tu fondo de emergencias en una cuenta bancaria. Como te explico en este artículo, tu dinero debe estar en instrumentos que al menos te ofrezcan un rendimiento parecido al de la inflación. Yo sugiero Cetesdirecto.com porque cumple con este requisito, no cobra comisiones y puedes invertir ¡desde $100 pesos! La cuenta se puede abrir en línea de manera inmediata. Cuando tienes tu dinero en Cetes directo puedes optar por tener disponibilidad diaria de tu dinero (Bonddía) o invertir en bonos con plazos que empiezan a partir de un mes (aunque puedes sacar tu dinero antes del plazo pero ya no te garantizan el interés acordado). Una idea sería tener tu fondo de emergencias en Bonddía y tus ahorros para otras cosas en diversos plazos, pero ¡tú decides!

3. ¡A correr!

Si quieres algo que nunca tuviste,

tienes que hacer algo que nunca has hecho.

Thomas Jefferson

Para tener tu fondo de emergencias deberás empezar a gastar menos de lo que ganas, y esto es una habilidad. Es importante que veas tu proyecto de crear el fondo de emergencias como algo prioritario. Entre más pronto juntes el dinero, ¡más probabilidad hay de que logres tu meta! Comprométete con este reto durante un mes. Comienza por eliminar cualquier gasto no esencial. Pero en serio: suscripciones, comidas fuera, salidas al cine. Piensa en actividades que te puedan redituar un ingreso adicional. Después del mes ve cómo te sentiste. Si lo consideras necesario, date un respiro, un pequeño premio, y luego vuelve a la carga con fuerza hasta que hayas logrado tu meta.

La construcción de tu fondo de emergencias es fundamental para la construcción de tu salud financiera. Requerirá de varias aptitudes: ser consciente, tener voluntad, concentrarte en tu meta y vivir con menos de lo que ganas. Y todos estos músculos los necesitarás también para construir riqueza.

Cuando logres esta meta, toma todas esas habilidades que desarrollaste y úsalas para subir al siguiente escalón de la pirámide ¡conviértete en inversionista!

Antes de irte, no olvides suscribirte a mi lista de envío para que no te pierdas ninguna de mis publicaciones.

https://sendfox.com/monederocondinero

Y cuéntame en los comentarios, ¿tienes un fondo de emergencias? Si no lo tienes, ¿qué crees que tendrías que hacer para tener uno?

También, puedes seguir a Edith Esquivel en sus redes sociales:

Página de Facebook

En Twitter la encuentras como @medithie

También, puedes escribirle por correo electrónico a mimonederocondinero@gmail.com

Jbf

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.
Icono de te puede interesar de en dineroenimagen

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR