¿Un mezcla difícil? Para pensiones

Un sistema de pensiones flexible, acorde al ciclo de vida de cada persona, así como micropensiones, son esquemas que se requieren en la evolución de un sistema de pensión nacional, que abarque a la mayoría de las personas, como a los trabajadores que operan, tanto en la formalidad como en la informalidad.

A decir de Carlos Lozano Nathal, integrante del comité de Actuarios de la ONU y recién nombrado presidente del Colegio de Actuarios de México, urge la aplicación de normas que permitan dar seguridad social, tema que podría salirse de control si no se hace algo en el corto plazo. Dado que su proceso de implementación llevaría tres años, considerando cambios legales y fiscales, así como el proceso de implementación y ejecución. De ahí que la participación del gobierno federal, la iniciativa privada y del propio trabajador, sean fundamentales.

No sólo para concientizar la importancia de establecer esquemas de ahorro que permitan cubrir sus gastos, a la hora del retiro laboral, sino para que los tres agentes tengan una participación activa, incluso donde los procesos se manejen vía outsorcing y el sector empresarial tenga una actividad más activa al igual que el trabajador, sin diluir los programas de pensiones actuales.

Con el objetivo de que los trabajadores que se encuentran en la economía formal e informal puedan acceder a una pensión de, entre 50% y el 80%, dado que, en la actualidad, las Afores no definen con claridad cuánto recibirá mensualmente un trabajador y por cuánto tiempo, incluso y, a decir del propio presidente de la Amafore, Carlos Noriega, las actuales aportaciones, en el mejor de los casos, permitirán que un trabajador opte por tener hasta  40% de sus ingresos actuales.

En breve compartiré cifras que ponen en rojo la premura de nuevas reformas a las pensiones.

SE PIERDEN EMPLEOS

ArcelorMittal, Altos Hornos de México, DeAcero y Tubacero, representan más de 70% de la producción siderúrgica nacional. Dichas firmas señalan que la gravedad y velocidad de la crisis que afecta a las empresas del acero requiere adoptar acciones que detengan el actual deterioro y salvaguarden la fuente de empleo. Ante el daño causado, el sector ha aplicado severos planes de contingencia, con la cancelación de inversiones, la pérdida de 10 mil empleos directos y 40 mil indirectos y, de no variar la actual situación, enfrentamos el riesgo de un despido de 7 mil trabajadores adicionales, con impacto en otros 40 mil trabajos indirectos. Por ello, demandaron al gobierno federal la aplicación inmediata de aranceles temporales para toda la cadena productiva del sector siderúrgico, aplicable solamente para los países con los cuales no se tienen tratados comerciales y que, en la medida de lo posible, permita estabilizar el mercado.

Iniciar, a la brevedad, la actualización del marco legal de comercio exterior, para igualarlo con el del socio comercial, EU y con sus recientes reformas, que protegen a cualquier sector industrial desde el momento en que se detecta el daño o afectación económica. ¿Será ello posible? Ojala que sí.