Carstens y el TLC

El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, durante su estancia en Washington, y flanqueado por Christine Lagarde, la directora gerente del FMI, fue claro: México va negociando de manera constructiva con Estados Unidos y Canadá, y existe gran potencial para mejorar y modernizar el Tratado de Libre Comercio.

Pero bajo la fuerte presión que está imponiendo el gobierno de Donald Trump al acuerdo comercial, el banquero central también enfatizó que si llegase a romperse el TLCAN, entonces la afectación para México sería de corto plazo.

Sin TLC, efecto de corto plazo

En el corto plazo, en efecto, los mercados se presionarían. Habría cierto descontrol por conocer la nueva etapa comercial sin el TLCAN. Por eso es importante dejar entrever el siguiente escenario, el de seguir exportando, importando e invirtiendo, sin un acuerdo comercial.

Carstens dejó en claro lo mejor para México, EU y Canadá: mejorar el acuerdo comercial, modernizar capítulos, agregar nuevos como el comercio electrónico, y mantener la región norteamericana competitiva y generando empleos.

Sin embargo, también dejó entrever que bajo la presión de EU, el acuerdo comercial podría terminarse. Y ahí se tendría que empezar a exportar bajo las reglas de la Organización Mundial de Comercio, lo cual sería un poco más tortuoso. Y mientras se da esa transición, los mercados tendrían un poco de presión.

Preparan, Hacienda y Economía, escenario sin TLCAN

Este martes acaba la cuarta ronda de negociaciones del TLCAN. Tanto el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, como el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, ya han esbozado que trabajan en la estructura arancelaria para poder exportar a EU o importar de EU, bajo los mecanismos arancelarios de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Incluso también se trabajaría en una política industrial bajo esas nuevas circunstancias. La siguiente etapa, sin TLCAN, implicaría exportar a través de las reglas de la OMC, con un bajo arancel de entre dos y seis por ciento. De hecho, por la falta de modernización del acuerdo comercial, hoy se exporta a EU en un 50% bajo las reglas de la OMC.

Pero también tendríamos que ver las nuevas reglas de inversión. Hoy en día las inversiones estadunidenses en México, que representan la principal fuente de inversión externa, tienen un trato similar a la inversión nacional. Pero sin acuerdo comercial, entonces podrían tener otro trato y ahí es donde podrían existir mecanismos legales para darles certidumbre.

Cuarta Ronda, difícil y para el martes

En esta cuarta etapa de negociación del TLCAN, la postura estadunidense es inadmisible, tanto para México como para Canadá. Para nadie cabe la menor duda del daño al comercio y  a la inversión que está realizando Donald Trump, el presidente estadunidense, que no cree en los bloques comerciales ni cree en la globalización ni en las tecnologías que han llevado a los países a tener mayores contactos comerciales, de información y de inversión.

De ahí las intransitables medidas de sus propuestas. La de tener una Regla de Origen de 85% para los vehículos, es imposible de realizar: hoy en día con el 65% de regla de origen trinacional, los inversionistas automotrices pueden traer piezas fuera del bloque norteamericano. Pero con el 85%, simple y sencillamente harías más caros los vehículos y serías poco competitivo. Además, Estados Unidos ha dejado esgrimir lo peor: quiere que el 50% de los vehículos tengan contenido estadunidense. Ya es absurdo.

Igual de absurda es la propuesta estadunidense de la cláusula de extinción, la Sunsent Clause, que obligaría a renegociar cada cinco años el acuerdo comercial. El martes los ministros darán su conferencia y, al parecer, habrá pocos avances de esta cuarta ronda de negociaciones.

Meade, Ministro de Finanzas del Año: Global Markets

Meade logró revertir el crecimiento de la deuda pública. Su paquete económico busca un traspaso sexenal sin sobresaltos financieros ni en tipo de cambio ni en finanzas públicas.

De ahí que la revista Global Markets, que revisa el comportamiento financiero de los gobiernos y de las empresas, lo está considerando como el Ministro de Finanzas del Año. Esto en el mercado de la reunión de otoño del Banco Mundial y el FMI, que acaba de terminar en Washington.

Para Global Markets, las agencias calificadoras terminaron mejorando la calificación de deuda soberana de México por el manejo de finanzas públicas. Más allá de premios, lo cierto: la administración de Peña Nieto hará el traspaso sexenal sin problemas de deuda.