Hilary y las lecciones del huracán Odile

Este viernes, Rodrigo Esponda, director del Fideicomiso de Turismo de Los Cabos (Fiturca), regresó de Las Vegas a ese destino y se encontró con un lugar cuya infraestructura fue puesta a prueba con día y medio de lluvias y vientos de hasta 70 kilómetros por hora, no obstante que el huracán Hilary estaba pasando en paralelo a la Península de Baja California a 300 kilómetros por el lado del Pacífico.

Venía de la Semana Virtuoso, la cadena de agencias especializadas en turismo de lujo y recordó cuando en 2014 el huracán Odile le pasó encima a Los Cabos, generando pérdidas por mil 220 millones de dólares, de los de entonces más de dos mil millones actuales.

En ese momento, él era director del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) en Estados Unidos, organismo que le asignó cinco millones de dólares para invertirlos en una campaña de publicidad emergente que, junto con el trabajo para recuperar el destino, permitieron que en poco más de cuatro meses estuviera nuevamente de pie recibiendo a los turistas.

Si esto hubiera ocurrido el fin de semana pasado, en lugar del problema que sólo afectó las carreteras y provocó una persona fallecida en el norte de la entidad, donde el turismo es mucho menos relevante, no habría de dónde obtener más de 300 millones de pesos para lanzar una campaña similar.

El propio Fideicomiso de Turismo de Los Cabos estaría atado de manos, pues sus recursos provienen de las ocupaciones hoteleras y éstas se habrían perdido, de ese tamaño es el riesgo de no contar con recursos para una emergencia provocada por la naturaleza.

Esponda estuvo platicando en Las Vegas con los ejecutivos de Go Hawái, la oficina de turismo donde se encuentra Maui, la isla más afectada por los incendios de hace unos días, y tuvo ocasión de confirmar nuevamente hasta qué punto es una actividad que se recupera rápidamente, pero sólo si hay condiciones adecuadas para ello.

Hoy, el turismo es la principal oportunidad para que esta isla se levante, pero como le compartieron a Esponda los ejecutivos hawaianos, habrá que identificar con mucha precisión el momento en que haya condiciones adecuadas para ello.

Basta recordar cómo Nueva Orleans estuvo varios años fuera de los circuitos del turismo, debido a la forma tan inadecuada en que se gestionó su recuperación.

Hoy, el turismo de lujo sigue siendo una gran oportunidad para México y por ello llamó la atención que Los Cabos fuera el único destino presente en el evento de Virtuoso, cuando en el pasado han caminado por allí otros como San Miguel de Allende, Punta Mita, Mayakoba y Costa Alegre.

Actualmente, de los destinos de sol y playa, los que están perdiendo terreno en el segmento de lujo son los ubicados en la zona del Caribe, pues los viajeros están reconociendo que ni el servicio ni la gastronomía son los mejores en islas como República Dominicana, Jamaica o Bahamas.

En cambio, según Esponda, esa mezcla de amabilidad, buen servicio, oferta gastronómica y bellezas naturales es la que le está dando un reconocimiento a México entre los viajeros más adinerados.

Hoy, Los Cabos tiene una tarifa promedio de 550 dólares la noche y de acuerdo con las proyecciones de Fiturca, este año la ocupación hotelera estará 10% arriba respecto a 2022.