Menos barreras de entrada y más competencia en la banca

Como ya le hemos comentado, uno de los temas que preocupa a los bancos sobre el aterrizaje de la Reforma Financiera es el estudio sobre competencia en ese sector, que elabora la Comisión Federal de Competencia Económica y que deberá estar concluido en junio próximo.

El temor reside en la presión política que existe sobre el pleno de la Cofece, presidido por Alejandra Palacios, para que emita recomendaciones que se traduzcan en menores tasas de interés, más crédito a pymes y una mayor inclusión financiera, que son los objetivos básicos de la Reforma Financiera.

El problema es que las tasas de interés no están determinadas por factores políticos sino por el costo real del dinero, y crecer el crédito a pymes y a personas físicas que están fuera del sistema financiero, implica un elevado riesgo e impide que bajen las tasas de interés.

Lo que menos quieren los bancos es que la cartera crezca demasiado rápido como sucedió en la década de los 90 tras la privatización bancaria y que se tradujo en la peor crisis del sector en 1995.

Los bancos insisten además en que el bancario no sólo es uno de los sectores donde se registra hoy una auténtica competencia en materia de productos y servicios que además tiene menores barreras de entrada.

Y esperan también que tras la firma del convenio de colaboración con Banco de México, la Cofece tome en cuenta el estudio sobre competencia en tarjetas de crédito que concluyó que sí hay una gran competencia entre los bancos en este segmento.

Reconocen, desde luego, que los siete bancos más grandes del país: Banamex, Bancomer, Santander, Banorte, HSBC, Scotia e Inbursa tienen una concentración de 78%, pero la banca en su conjunto en México tiene un Índice de Herfindahl e Hirschman (IHH) de mil 684 puntos, mientras que la concentración en telefonía fija con una sola empresa es de siete mil 651 puntos y tanto la industria de televisión como la del cemento tienen una concentración de siete mil 235 y siete mil 180, respectivamente.

El IHH se utiliza a nivel mundial para medir la concentración en los distintos sectores de la economía, y se considera que una puntuación entre mil 500 y dos mil puntos refleja una concentración moderada.

Es más fácil abrir un banco en México

Un estudio del BBVA Bancomer, que preside Luis Robles, revela que las barreras de entrada para nuevos bancos se han reducido en México, a grado tal que mientras en 2005 estábamos, en una escala de cero a 10, con una calificación de 6.8, en 2010 tuvimos 3.9, pero hoy es más fácil abrir un banco en el país que en cualquier país de América Latina o de naciones desarrolladas como Australia, Países Bajos y España.

Y mientras en 1996 había en México sólo 23 bancos, hoy están autorizados 47. A partir de 2008 comenzó la autorización de bancos de nicho y se redujo el capital mínimo para abrir un banco a 460 millones de pesos y a partir de 2009 se autorizaron los corresponsales bancarios.

Importancia del mercado relevante

Desde luego, los bancos esperan que en estudio sobre competencia, la Cofece considere no sólo a los bancos sino al mercado relevante donde participan otras entidades financieras y comerciales, ya que evidentemente el índice de concentración se reduce aún más.

El IHH para tarjetas de crédito es de dos mil 686 en la banca porque no todos los bancos participan en este segmento, pero el IHH expandido se reduce a mil 590, abarcando empresas comerciales como Liverpool y Palacio de Hierro, American Express, Sears, etcétera. El IHH se reduce más, a mil 117, si se incluye al Infonacot.

Y lo mismo sucede en crédito hipotecario sumando al Infonavit, Fovissste y sofomes; en automóvil incluye a distribuidoras y financieras de armadoras; en depósitos e inversiones con cajas de ahorro, sofipo; fondos de inversión y hasta el propio gobierno con Cetes directo, y en crédito a empresas abarca a bancos en el exterior, proveedores y mercados de deuda y capital, tanto locales como internacionales.

Cofece primera sanción a cartel internacional

El pleno de la Cofece aprobó una multa por 223.2 millones de pesos, que es la primera sanción, a un cártel internacional en el que participaron siete empresas para fijar precios de compresores herméticos que fueron importados y comercializados en México entre 2004 y 2008.

Es también la primera vez que se aplica una sanción tras una investigación con ayuda de una de estas empresas bajo el programa de inmunidad por lo que no fue multada.

Las empresas sancionadas son Whirlpool y Panasonic con sanciones de 89.9 millones de pesos cada una; y Tecumseh Brasil, ACC con 38.7 millones. Fueron sancionadas también Embraco NA, Embraco México y Tecumseh con multas cada una de 1.3 millones de pesos que coadyuvaron en la práctica anticompetitiva que consistía en ponerse de acuerdo sobre los incrementos de precios y las estrategias de comercialización que seguían cada año.