La licitación del año

El gobierno federal, al mando de Enrique Peña Nieto, dará a conocer este mes la licitación de salud más esperada. Se trata de la licitación consolidada para 2015, una de las compras del sector salud más grandes porque incorpora medicamentos para el IMSS, al mando de José Antonio González; del ISSSTE, que dirige Sebastián Lerdo de Tejada; Seguro Popular; hospitales de Pemex y algunas otras dependencias de la República.

Se trata de la mejor transacción en salud, por los ingresos que podrían llevarse las farmacéuticas nacionales y extranjeras. Se trata de la madre de todas las batallas por alcanzar la rebanada más grande de compras del sector salud. La bolsa que está en juego podría alcanzar los 70 mil millones de pesos entre medicamentos, vacunas y material de curación.

No obstante, el beneficio directo para la industria, para el sector salud se espera que represente ahorros sustanciales. El cálculo para el IMSS es de siete mil millones de pesos, que de ser así se podrían ir a la mejora de sus operaciones, que bien hace falta.

Mientras que para otras dependencias se estima que oscile el ahorro en los mil 900 millones de pesos, que sería bueno se destine a tecnología y desarrollo.

Además con esta operación también se espera que se le dé paso a la entrada de medicamentos biotecnológicos.

A fin de cuentas es el paso inmediato de la salud. Un caso puede ser el de medicamentos biotecnológicos para el tratamiento de enfermedades crónicas como cáncer, diabetes, padecimientos cardiovasculares y obesidad, que representan el mayor costo para el sistema de salud y el gasto para las familias mexicanas.

También con este paso se prevé que los medicamentos genéricos o que ya no tienen patente verdaderamente tengan precios más accesibles, a fin de cuentas es el mayor beneficio de este nicho de mercado.

En fin, habrá que seguir los pasos de esta operación que en muchos, en años pasados tuvo varias irregularidades y pocos beneficios para el gremio como para las instituciones involucradas.

Novartis ataca

Novartis declaró que los medicamentos de imitación, conocidos como biosimilares copias de medicamentos biotecnológicos hechos de células vivas que no pueden ser replicados exactamente, tendrán una participación importante, y con ello la empresa tomará mayor importancia durante los próximos tres años.

Incluso se espera un punto de inflexión tras grandes lanzamientos de biosimilares de 2017 a 2019, cuando muchos fármacos de anticuerpos de alto precio, que están entre los más vendidos de la industria farmacéutica, perderán la protección de patente.

De ahí que varias compañías, incluyendo Teva y Celltrion de Corea del Sur y de Israel, están compitiendo para desarrollar biosimilares y se avecinan vencimientos de patentes sobre los medicamentos biotecnológicos de gran éxito para el tratamiento de cáncer y enfermedades autoinmunes.

A medida que envejece la población mundial, las farmacéuticas como Novartis están apostándole al uso cada vez mayor de los biosimilares, así como los sistemas de salud con problemas de liquidez buscan maneras de reducir el gasto. Interesante.