David Páramo

Análisis superior

David Páramo

20 Jun, 2013

Otras vías

El presidente de la Cofetel, ignorando la realidad, hizo creer que el programa piloto del apagón analógico en Tijuana sí había funcionado y, en su visión, si hubo problemas tuvieron que ver con la falta de recursos oportunos y la intervención de factores externos.

La realidad es que Mony de Swaan ignoró otras alternativas que se hubieran adaptado de una mejor manera a la realidad nacional que no sólo hubieran disminuido el costo sino que, además, hubieran aumentado la eficiencia de este programa.

Aún el pleno de la Cofetel no ha decidido oficialmente posponer las siguientes pruebas del apagón analógico que estaban programadas para finales de este año. El presidente de la Cofetel, tomando una atribución que no es de él sino del pleno, ha dicho que se detendrán mientras no haya recursos.

Los otros tres comisionados no se han pronunciado públicamente y mucho menos en el pleno del organismo; sin embargo, comisionados como Alexis Milo sí han planteado otras alternativas que podrían funcionar de una mejor manera.

Una de las posibilidades que sería sustancialmente más barata y eficiente sería entregar cupones a las personas que requieran decodificador (el programa en Tijuana se basaba en la entrega e instalación de los decodificadores), los cuales serían redimidos ante negocios previamente certificados por el gobierno federal.

Este programa haría que el gobierno fuera el responsable no sólo de la entrega de los recursos sino de la distribución de los cupones. Las empresas tendrían una mayor capacidad de atender la demanda y dejar a las personas que pudieran redimirlos de una mejor manera.

Se ha llegado al detalle de proponer que los cupones sean entregados en los domicilios a través de la red de la Comisión Federal de Electricidad que tiene una cobertura de 98% de la población.

El programa fallido de Tijuana fue asignado por el presidente de la Cofetel a empresas privadas que, como se demostró, tenían una baja capacidad no sólo para llegar a todos los hogares y menos para certificar su entrega. No debe olvidarse que antes de entrar en vigor y luego cancelado ante la evidencia de las fallas, los comisionados de la Cofetel retrasaron su entrega porque Teletec no podía demostrar que habían entregado los certificados.

Subsidio

Otra de las propuestas es que se establezca un modelo que combine subsidio con crédito, los cuales permitirían que sin lugar a ninguna duda haya incentivos para que la industria participe de una manera activa.

Con un esquema similar al propuesto, como el que se utilizó para el cambio de refrigeradores durante el sexenio pasado, no sólo se podrían generar ahorros sino ir muchísimo más rápido.

La mezcla permitiría que las personas pudieran optar por tomar el decodificador o usar el cupón como vale para cambiar el televisor.

Es importante destacar que Estados Unidos utilizó un sistema similar para realizar su apagón analógico. Los cupones fueron entregados a través del Servicio Postal sin discriminar la necesidad a partir de 2006.

Se trataba de vales hasta por un máximo de 40 dólares los cuales podrían ser redimidos por convertidores o nuevos aparatos en un esquema de crédito, lo que permitió hacer el apagón sin problemas.

Habría que analizar cuál sería el impacto para México de hacer un esquema a través de CFE de entrega de cupones, los cuales puedan ser redimidos por un convertidor o como parte de un crédito por una televisión que reciba señales digitales.

Si se comenzaran a repartir ya los cupones se tendrían mayores posibilidades de avanzar más rápido que de programa piloto en programa piloto y así poder cumplir con la Constitución que establece que el apagón nacional debe darse el último día de 2015.

Preocupación

Los miembros de la Coparmex tienen problemas sumamente serios. Mientras que algunos, como los del centro patronal de Chilpancingo, comienzan a ceder ante la tentación de recurrir a vías fuera del marco de la Constitución para enfrentar el crecimiento de la delincuencia organizada que no sólo secuestra, roba o cobra cuotas: termina con la tranquilidad de quienes generan empleos y, por lo tanto, riqueza.

Su presidente, Juan Pablo Castañón, anda perdido en análisis de salón o que poco sirve como cuestionar los impactos de la reforma laboral o la necesidad de ir hacia una nueva reforma.

Los miembros del centro patronal de la capital de Guerrero abierta y públicamente están asesorándose de autodefensas que, como hemos señalado en este espacio, son un verdadero peligro puesto que toman atribuciones que en una democracia se dejan al Estado como el uso legítimo de la fuerza.

Debe recordarse que en países como Colombia hubo un tiempo en el que parte del sector empresarial decidió por el camino de las autodefensas y terminaron vinculándose no sólo con guerrilleros sino con narcotraficantes.

Es verdaderamente grave que Castañón ande perdiendo el tiempo en lugar de llamar al orden a los miembros del sindicato patronal quienes, verdaderamente, están caminando por una ruta muy peligrosa.

Destrabar

Es una necedad discutir si la penetración de la banca es adecuada o baja, puesto que obviamente hay una gran necesidad de llevar servicios bancarios a un número mayor de mexicanos.

De esta ociosidad muchos opinan que se debe a que los bancos no hacen bien su trabajo y hay una larguísima letanía de mitos y mentiras. Creer en este análisis sería lo mismo que suponer que a un vendedor de tamales no quiere hacerlo porque está cómodo sacándose la mugre del ombligo.

Es evidente que los bancos quieren llevar más servicios bancarios a toda la población puesto que se trata de una fuente de ingresos sólida y de largo plazo.

Así la pregunta correcta debe ser, por qué es tan baja la penetración de los servicios financieros en la población. Si se cree que todo es culpa de los bancos no sólo se cae en un lugar común sino que se ignoran causas reales que tienen un impacto sustancialmente mayor.

Habría que analizar el bajo nivel de ingresos de la población, la muy extendida evasión fiscal y la profunda incultura financiera en el país. Si no se atacan estos puntos no podrá llegarse a una mejor penetración de la banca.