Alicia Salgado

Cuenta corriente

Alicia Salgado

8 May, 2014

¡Un Presidente real!

CANCÚN.— Kevin Spacey, mejor conocido como Frank Underwood, el actor principal de la serie de Netflix, House of Cards, que ha vuelto locos no sólo a estadunidenses, sino a los mexicanos, y que habla sobre las redes de la política estadunidense, su mundo e inframundo, vino a revolucionar la versión 38 del Tianguis Turístico, México-Quintana Roo 2014.

Después de la forma en que en su Twitter difundió su imagen saludando al presidente Enrique Peña, imagen que mereció una selfie con el título “Un Presidente es real. Con el presidente Peña Nieto en México.

“Fue bueno conocer a un hombre que también está haciendo progresos en el primer año de administración”, no sólo se convirtió en trending topic en menos de diez minutos, sino que posicionó la oferta turística de México del #TT (Tianguis Turístico) en noveno lugar mundial en trending topics en Twitter con sólo un click. ¿Algún político mexicano ha logrado eso antes?

Por cierto, también el gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, subió su foto con KS y, bueno, es natural que algunos se sorprendieron por la invitación al actor, realizada por la secretaria de Turismo, Claudia Ruiz Massieu, y el Consejo de Promoción Turística de México, que dirige Rodolfo López Negrete.

Pero si considera que un personaje que tiene un alcance de 3.5 millones de followers, que no son inflados por la magia de un robot, sino por su sagacidad y fama, decida venir a México por invitación, no por contrato, y pararse al micrófono y hablar bien de México, decir que es su destino preferido por su cultura, la calidad de su gente, su gastronomía y hasta el “mexican lifestyle”.

De pilón, Kevin Spacey convocó a invertir en México, a viajar a México dijo que él debería hacer más cine en México. Mire, Ahí estaban desde José Chapur hasta don Miguel Alemán Velasco y su hijo Miguel Alemán Magnani, dos inversionistas que le apuestan al país, y con la misma disfrutaron al actor-productor que está en su mejor momento.

Conclusión: es evidente que en una campaña de promoción de la imagen de un país que tiene alcances globales como la que está efectuando por México el CPTM, con un presupuesto de 180 millones de dólares al año, dé la bienvenida a los apoyos espontáneos —porque no se le contrató a él para decir lo que dijo— que al ir directo al consumidor global que viaja, que invierte, que se interesa, hace mucho más para neutralizar campañas negativas e incluso alertas de seguridad que cualquier discurso político. ¿O qué, para promover el turismo mexicano hay que seguir nadando con tiburones y aventarse de tirolesa, andar en bici en un pueblo mágico?

No sé qué opina, pero los resultados de ingreso de divisas, ingreso de turistas y gasto promedio del turismo internacional muestran que hay “inteligencia comercial aplicada” en movimiento, y se dirige a personas con potencial de viajar y gastar en México.

Por cierto. El secretario de Hacienda y Crédito Público le puso su granito con sabor a sonrisa a la facilitación de viajes y la secretaria Ruiz Massieu sigue sumando sonrisas. Ayer con la eliminación de las cuatro garitas aduanales de Quintana Roo, que realizó el presidente Enrique Peña, se dio a conocer que le ponen semáforo al tránsito aduanal.

De Fondos a Fondo

En lo que parece un tiro de precisión para aprovechar lo más que se pueda de los negocios que se desprenderán del Programa Nacional de Infraestructura, Fibra Macquarie, que en México preside Jonathan Davis Arzac, ya movió sus fichas en ese rubro.

Le cuento que ayer informó a la Bolsa Mexicana de Valores el nombramiento de Jonathan Walbridge en la dirección general del Fondo de Infraestructura Macquarie México.

Walbridge, antes de Fibra Macquarie, trabajó en Credit Suisse en banca de inversión, pero el fuerte de Walbridge, sin duda, lo desarrolló en su ejercicio profesional de ocho años en la firma MIRA, administradora de fondos en Londres, en donde se enfocó en los sectores de transporte y energía… embona perfecto con los vientos que soplan, ¿no?

 Las inversiones de Grupo México, cuyo consejo de administración preside Germán Larrea Mota Velasco, hasta el momento se mantienen en los montos que anunció.

Al inicio de este año, el conglomerado fijó inversiones por tres mil 397 millones de dólares (mdd); cifra que superó a la de 2013 en el mismo rubro y que ya entonces había sido récord con dos mil 852 mdd, 34% mayor a las de 2012.

El monto para este año que aprobó el Consejo de Administración de la firma se divide en dos mil 498 mdd para su división minera; 519 mdd para la de Transporte y 380 mdd para la de infraestructura; sin embargo, estos montos podrían aumentar considerando la inversión en modernización de redes de infraestructura ferroviaria.

Los montos a invertir se consideraron sin tener en cuenta las reformas, en especial la energética y desde luego sin conocer aún el ambicioso Plan Nacional de Infraestructura (PNI) 2014-2018 que anunció el gobierno federal por 7.7 billones de pesos.

En el caso de la división de transporte, que dirige Rogelio Vélez López de la Cerda, persiste la nube de la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario, congelada pero viva en la Comisión de Comunicaciones y Transportes, que preside Javier Lozano en la Cámara de Senadores. Lo que se dice en esta división del conglomerado es que nada frenará la inversión planeada por 519 mdd, pero en realidad participará en el tendido de redes nuevas que mejorarán y ampliarán su conectividad hacia el sur y hacia el norte.

Para el primer trimestre de este año la división de Transporte, integrada por Ferromex-Ferrosur y Transporte Intermodal México ha invertido 26 mdd, cifra que representa 5% del total de lo que informó tiene en cartera para invertir este año; es decir, que le faltan por desembolsar 493 millones de dólares.

No obstante, el desempeño que mostró la división transporte fue muy dinámico. Firmó un contrato multianual con Mazda, que preside Leopoldo Orellana, para transportar 100% de la carga de la armadora automotriz de Silao, Guanajuato, a las diferentes conexiones.

En el caso de las empresas acereras, cerró contratos multianuales con las más importantes; en este renglón se debe destacar Ternium México, que preside Máximo Vedoya, que se había negado a renovar el contrato a fines de marzo. Y en los primeros tres meses firmó los contratos con la firma Deacero, de Raúl Gutiérrez Mugerza, y con ArcelorMittal que en nuestro país encabeza Bill Chisholm.

Así, que considere que estos montos, lejos de frenarse, podrían ser mayores, desde luego las reformas y el PNI son la llave de la caja de Pandora.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube