Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

29 Ago, 2015

Pensamientos sobre China

Ya son varias semanas en las que hemos tenido un comportamiento volátil en los mercados accionarios, de materias primas y de divisas. Parte de esta turbulencia en los mercados ha estado influenciada por las percepciones de lo que sucede en China. Voy a presentar una serie de argumentos de por qué hay cosas de China que es normal que sucedan.

El crecimiento de China en las últimas dos décadas ha sido impresionante. Hay aspectos vinculados con el pasado que explican por qué se pudieron alcanzar esos niveles de crecimiento y aspectos relacionados con el futuro que nos permiten entender lo que sucederá.

Respecto del pasado hay evidencia empírica que muestra que utilizando ciertos controles estadísticos hay una relación en la que niveles menores de PIB per cápita se pueden relacionar con mayores tasas de crecimiento.

La explicación puede ser muy intuitiva ya que con un menor nivel de riqueza, si se empieza un proceso de convergencia a mayor desarrollo impulsado por mayor inversión o por reformas, la brecha con países de mayor desarrollo es grande. Hay un espacio para crecer a una tasa mayor durante un cierto tiempo.

La explicación anterior también nos puede llevar a entender que esas mayores tasas de crecimiento no se pueden mantener de manera permanente. Conforme se avanza en el nivel de PIB per cápita, eventualmente se llegará a un nivel en el que la tasa de crecimiento bajará por cuestiones estructurales.  

Un ejemplo de hace algunos años que muestra que este fenómeno de que el crecimiento elevado no se puede mantener de manera permanente es el de Japón.

Posterior a la Segunda Guerra Mundial y durante cuatro décadas, la economía japonesa creció a tasas muy elevadas. De hecho, durante esos años desarrollaron industrias en las que se convirtieron en la referencia a nivel mundial en tecnología y calidad. Se pueden mencionar a los sectores de automóviles, electrónicos y computadoras, entre otros.

A principios de los años 90 se especulaba que en cualquier momento la economía japonesa podría superar en tamaño a la de Estados Unidos. Poco después, la economía japonesa redujo sus tasas de crecimiento y entró en un periodo de dos décadas en lo que se estancó.

La explicación tiene que ver con que en Japón hubo sectores, como el de comercio, de alimentos y de construcción que no evolucionaron y eventualmente frenaron el ritmo de crecimiento de la economía.

Con China sucederá algo parecido. Eventualmente se dará un contexto en el que ya empezará a crecer a tasas menores. Las razones que lo pueden explicar también tienen características estructurales. Una de ellas es que mucho del crecimiento ha estado basado en inversión en infraestructura. Esto tiene un límite.

Hay una característica de la economía china que tuvo Japón en su momento y es que sus bancos más grandes estaban entre los mayores del mundo.

Los bancos japoneses tuvieron problemas por activos que perdieron su valor generando pérdidas. El gobierno decidió que no se reconocieran dichas pérdidas, pero tuvo como consecuencia que se frenaron su dinamismo afectando a la economía.

Hoy los bancos chinos son una interrogante pues puede haber activos de mala calidad que puedan afectar su solvencia y tener un impacto en la economía.

En resumen, la baja de crecimiento es algo que sucederá. Lo relevante es que sea de manera gradual y que no existan factores que lo hagan pasar de un bajo crecimiento a tener un problema.

*Director general del FUNDEF

guillermozamarripa@itam.mx

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