Darío Celis

Tiempo de negocios

Darío Celis

9 Oct, 2015

Bancomer contra las cuerdas

Con la novedad de que BBVA-Bancomer, el banco de Francisco González, perdió ante el SAT un litigio y podría verse obligado a reponer al organismo de Aristóteles Núñez el Impuesto Sobre la Renta no declarado sobre utilidades por tres mil 160 millones de pesos obtenidas en el año 2004.

La institución que preside Luis Robles Miaja presentó en 2008 un juicio de nulidad fiscal ante una revisión del Servicio de Administración Tributaria respecto al ejercicio de hace ya diez años. Eran los tiempos en que el banco era dirigido por Jaime Guardiola. Tocó todavía a Héctor Rangel Domene, como presidente de BBVA-Bancomer, inconformarse ante la autoridad fiscal: ni más ni menos que Francisco Gil Díaz, secretario de Hacienda en el gobierno de Vicente Fox. Su brazo fiscalizador era José María Zubiría en el SAT.

El banco podría pagar al fisco por concepto de ISR alrededor de 948 millones de pesos. Ambas partes se trenzaron en un largo litigio y en mayo del año pasado el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA ) dictó sentencia en su contra.

BBVA-Bancomer siguió combatiendo el requerimiento del SAT que el TFJFA resolvió en el juicio número 4690/2008 y se amparó, radicándose el recurso en el Décimo Sexto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, bajo el folio número 643/2014.

Pero la noticia es que dicho colegiado hizo bueno el proyecto del magistrado ponente Carlos Amado Yáñez y determinó la improcedencia del amparo. La resolución salió desde el 16 de febrero pasado. Es decir, casi ocho meses y no se ha reportado como evento relevante.

El caso ya se está analizando en la Corte y se cree que la máxima instancia que preside Luis María Aguilar podría resolverlo en unas semanas. Y no sólo respecto a las utilidades de 2004. El SAT también se metió a escudriñar las de 2005 y 2006. BBVA argumentó que no sólo en 2004, sino en 2005 y 2006, no había obtenido utilidades en nuestro país y con ello evadió el pago de cientos de millones de pesos por concepto de reparto de utilidades a miles de empleados de Bancomer.

El BBVA, al igual que OHL, que por cierto tienen como accionista común a Juan Miguel Villar-Mir, por lo visto también maneja doble contabilidad en México. Una en la que tiene ganancias y expone a sus accionistas en España y otra en la que alega pérdidas para esquivar al SAT.

Desde hace siete años un conjunto de extrabajadores litiga el pago de esas utilidades. BBVA-Bancomer igualmente evadió esa responsabilidad tapando el hoyo muy sencillo: en noviembre de 2006 toda su plantilla laboral cambió de patrón al socorrido esquema de outsourcing. Le adelanto que esos empleados ya están promoviendo una demanda colectiva.

EL SAT DECIDE

Y si del SAT se trata, le adelanto que ya sólo depende de este organismo que preside Aristóteles Núñez para que pueda llevarase a buen puerto la capitalización de GEO, la atribulada viviendera que fundara Luis Orvañanos.

Resulta que como parte del proceso de reestructuración financiera se le está pidiendo una condonación de adeudos bajo el artículo 146-B del Código Fiscal de la Federación. Se trata de impuestos en los que se incurrieron antes de que entrara a concurso mercantil. Sólo en ese rubro se habla de pagos pendientes a la Secretaría de Hacienda, de Luis Videgaray, arriba de los dos mil millones de pesos. Ya se imaginará que en un contexto de apreturas financieras no es precisamente la mejor petición al gobierno. Ellos tienen la última palabra.

LEY A DEBATE

Viene un debate interesante con la discusión de la iniciativa de la Ley General del Ejercicio Profesional Sujeto a Colegiación y Certificación Obligatorias. La firman, entre otros, senadores como Roberto Gil, Enrique Burgos y Arely Gómez, hoy procuradora de la República. En esencia lo que plantea es que para ejercer como abogado y algunas otras profesiones se tendría que estar afiliado a barras y colegios. La experiencia demuestra que esos gremios poco aportan a la profesión. Un entorno como el que se pretende crear sólo propiciaría grupos que controlarían tales barras. O sea burocracia, costos, trámites y hasta corrupción. No pierda de vista esta iniciativa.

NO GUSTA TPP

El que trae el santo de espaldas es Ildefonso Guajardo porque cada vez se suman más inconformes por lo que negoció México en el Acuerdo de Asociación Transpacífico. Otra rayita al tigre fue en Acapulco, durante la 31 Convención Minera. Abuchearon cuatro veces la presentación del fideicomiso de Fomento Minero (Fifomi). La rechifla llegó al clímax cuando el titular de Economía ofreció apoyos de infraestructura, financiamiento, capacitación y asistencia técnica a empresas de Hidalgo, Zacatecas, Coahuila, Sonora, Chihuahua y Durango, pero no así al anfitrión: Guerrero.

MULTIVA CRECE

Grupo Financiero Multiva, de Olegario Vázquez Aldir, mantiene sus planes de  expansión y anunció la apertura de seis sucursales más de Banco Multiva para este año. Del total, tres estarán ubicadas en la ciudad de Puebla, una en Celaya, otra en San Luis Potosí y una más en León. Según los planes de crecimiento del banco, al sumar estas sucursales llegará a 51 oficinas en el país, con lo cual, en apenas un año ha duplicado el número de unidades en las diferentes entidades del país.

COFECE LIMITA

Ayer por la tarde-noche llegó la notificación de la Comisión de Competencia a la concentración de Soriana y Comercial Mexicana. La instancia presidida por Alejandra Palacios consideró que en algunos mercados sí se dan efectos anticompetitivos, por lo que se establecieron algunos candados a las empresas de Ricardo Martín Bringas y Carlos González Zabalegui. Como quien dice, la suma sí tuvo sus bemoles.

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