Bank of America no cerró operación Marzán

Desde la revelación de la primera ronda de Panama Papers, el expediente más espinoso de los casos mexicanos que se incluyeron fue la operación de “aparente simulación” de concentración que realizó Nadro, de Pablo Escandón, para comprar Marzán.

Se trata de operaciones realizadas entre 2014 y 2015. En la primera, Genomma Lab, dirigida por Rodrigo Herrera, compró en dos momentos (10 de marzo y 6 de octubre), el 100 por ciento de Marzán a Casa Saba, de Moisés Saba, en 2,106 millones de pesos.

Cuando la adquiere, forma un fideicomiso de administración en Deutsche Bank, entonces dirigido por Jorge Arce, para administrar a la compañía y, desde entonces, se dijo que una parte se vendería a laboratorios interesados en el modelo de distribución de Marzán.

La compra se realizó con crédito y caja y, para mediados del 2015, Genomma Lab contrató a Bank of America, dirigido por Emilio Romano, como agente para realizar la venta y, en eso estaban, le acercó una decena de potenciales compradores, en su mayoría internacionales, pero en medio del proceso, pero no se concluyó el proceso porque Genomma recibió una oferta directa del Fondo Holandés Moench Coöperatief, formulada por Luis Doporto, socio principal del despacho Donofrio Abogados, junto con Karl Frei, exdirector de UBS.

La oferta fue por el 49 por ciento del capital de Marzán en 1,050 millones de pesos, operación que no cerró ni aconsejó Bank of America, como consta en los expedientes que han entregado tanto Bank of America como Genomma Lab y sus abogados, en la investigación del caso que la Dirección General de Concentraciones de la Cofece, que lleva José Luis Ambriz.

Bank of America cobró una comisión por el contrato que tenía con Genomma Lab, pero quedó asentado que no recomendó y tampoco objetó la venta al Fondo, luego de que el agente económico le informó que entregara los expedientes de Grupo Marzán a los abogados del Fondo.

Por otra parte, los abogados de Genoma Lab entregaron el expediente de concentración, al mismo tiempo que Doporto-Frei, a la Cofece para autorización de la compra venta toda vez que involucraba más del 51 por ciento de un grupo con el 15 por ciento del mercado, y en ningún caso, Genomma Lab fue informado que dentro de los accionistas del Fondo que adquirió Marzán (según Panama Papers 83 millones de dólares o cerca de 1,500 millones de pesos), estaba la esposa del principal accionista de Nadro.

La investigación existe. Los papeles que muestran lo que comento tanto en el caso de Bank of America como de Genomma, han sido exhibidos a la autoridad. El despacho que los representa es uno serio y, con toda sinceridad, no puedo afirmarle que haya sido comprobada la simulación de la concentración que se presume en los Panama Papers.

De haber simulado, la sanción de la nueva Ley Federal de Competencia Económica es de las más altas, además de cárcel y, bueno si Héctor Doporto, uno de los representantes patronales en el Consejo Técnico del IMSS, estuviera involucrado, creo que a la misma patronal le convendría que se aclarara por la controversia suscitada con el 32 de la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos, ¿no cree?

DE FONDOS A FONDO

#MomiosEnFavorDe…. El jueves próximo se realizará la votación en el Consejo Nacional Agropecuario para elegir al presidente que sucederá a Benjamín Grayeb. Tanto Bosco de la Vega como Vicente Gómez Cobo han  buscado con todo el apoyo de organizaciones y empresas, se han recorrido dos veces el país, pero es muy probable que el efecto de la apertura a las importaciones de papa criolla americana, en lugar de perjudicar la candidatura de Bosco, la haya fortalecido.

Los dos dicen que tienen ventaja, pero por dentro, la membresía “silenciosa”, la que lo mismo entregó el voto a uno o a otro para registrarse, parece inclinarse por el primero por considerarlo “factor de unidad”, pues atrajo de nuevo al grupo de Sinaloa al CNA, grupo que dejó de participar desde que Haberman (el jitomatero) perdió con Juan Carlos Cortés y luego, el finado Ley contra Benjamín Grayeb.

Por lo pronto, todos en el CNA andan preocupados, pues saben que algo raro está sucediendo con el tema de la canasta básica y la evaluación del Coneval de pobreza alimentaria, porque hay una presión oficial fuerte sobre los productores de la cadena agropecuaria y pecuaria. “Se anticipan tiempos difíciles”, dicen.

#ElMiedoNoAndaEnBarco…. Pues se lo ratifico. La API de Quintana Roo, que dirige Ercé Barrón Barrera, sin mucha explicación,  canceló la licitación de la 4ª terminal de cruceros en Cozumel. Lo hizo de la misma forma que cuando publicó la convocatoria: en viernes por la tarde-noche.

Dos factores influyeron: Que la naviera inversionista previamente comprometida desistió de entrar a un concurso con elementos de posible corrupción y que MSC, Disney o Norwegian Cruice Line, que podrían haber sido las elegidas, prefirieron no meterse en un problema de cumplimiento y corrupción en sus corporativos en EU.

El segundo es que el Barrón y Roberto Borge, que encabeza el Consejo de Administración, midieron muy bien en qué papel quedaría la licitación frente al gobernador electo, Carlos Joaquín González, con quien Ercé, a quien le hubiera gustado seguir en el API, no tiene la mínima esperanza de chamba.