David Páramo

Análisis superior

David Páramo

22 Sep, 2016

Bahamas Leaks

No está en contra de la ley tener dinero, tampoco invertirlo en otras naciones. El delito es no pagar impuestos; sin embargo, hay quienes no aprendieron la lección de los Panama Papers y nuevamente hacen especulaciones y juicios sumarios ante una filtración, no investigación, de un grupo de periodistas internacionales.

Esta nueva versión, que tiene que ver con inversiones en Bahamas, es básicamente lo mismo. Un listado de empresas internacionales y personas quienes tenían depositados recursos en aquella nación.

Con facilidad hay quienes buscan linchar y hablar sobre las rodillas buscando quién sabe qué intereses ulteriores tratando de hacer inferencias que simple y sencillamente no vienen al caso.

Se deben tomar actitudes prudentes, como las del Servicio de Administración Tributaria, encabezado por Oswaldo
Santín
, que ante la filtración emitió un comunicado de prensa en el cual establece que revisará el caso de los 40 mencionados en lo dado a conocer.

Hay casos, como los señala la propia nota, en los cuales queda claro que no cometieron ningún delito.

Por ejemplo, se menciona a Olegario Vázquez Raña, propietario y director general de la empresa Marshalls Creeks, y a Olegario Vázquez Aldir, dueño y director general de Albion Hall Ltd. Las empresas fueron creadas para realizar inversiones patrimoniales.

Ambos empresarios han puesto a disposición de la autoridad copias de los registros que hicieron ante el SAT desde el momento de la constitución de las empresas, así como del pago de los impuestos correspondientes ante esta misma autoridad.

Que no quede duda, las inversiones existen, pero están total y absolutamente dentro de la ley. Las pruebas están disponibles.

EL “BOBO”

Entre julio y octubre del año pasado un tema común en mi columna era mostrar la intemperancia irresponsable del entonces presidente de la Canacintra y el actual presidente de la Concamin, Manuel Herrera, porque un día sí y otro también gritaban que los empresarios no aguantaban más el elevado nivel del tipo de cambio y que ahí venía la escalada de precios.

No se quedaban ahí sino que pedían a papá gobierno que tomara medidas urgentes para defender el nivel de tipo de cambio y evitar la inflación.

En aquel momento planteé un reto que, hasta el momento, nadie ha podido cumplir: Que con datos duros, no especulaciones o creencias, a que señalaran ¿dónde está la crisis?

Durante los últimos 16 meses la inflación se ha mantenido por debajo de la meta de largo plazo autoimpuesta por Banco de México, es decir, la depreciación del tipo de cambio no se ha transferido al nivel general de precios.

Sí, algunos productos han aumentado de precio (especialmente los bienes duraderos de origen importado lo que ha generado que el consumo de bienes producidos en México crezca y el de los extranjeros disminuya como lo informa el Inegi), pero en el balance la inflación sigue controlada a pesar de la elevada volatilidad y depreciación del tipo de cambio puesto que hay algunos otros que han tenido importantes disminuciones.

Ayer, en la crisis de histeria algunos medios que pretenden parecer serios decían que una señal de la crisis devaluatoria era que IZZI había tomado la decisión de aumentar 4% el precio de sus servicios, algo así como 12 pesos mensuales en el paquete básico.

Otros más difundieron especulaciones según las cuales se iba a incrementar el precio de las tortillas, el del Metro de la Ciudad de México y quién sabe cuántas cosas más.

Se trata, como le he venido explicando, de una cadena seguida por imbéciles útiles quienes están sedientos de alguna nota (no importa el medio) que vaya en el sentido de lo que ellos imaginan. No buscan la verdad sino la confirmación de que sus creencias son hechos. Lo mismo pensaban aquellos quienes humillaron a Galileo por decir que la tierra giraba en torno al sol, cuando la opinión mayoritaria no lo aceptaba.

INACEPTABLE

En un entorno en el que el Consejo Coordinador Empresarial, encabezado por Juan Pablo Castañón, e incluso Canacintra, encabezada por Enrique Guzmán, hacen llamados a la prudencia explicando que si bien esta nueva oleada de depreciación del peso puede impactar algunos precios de la economía, no su generalidad o que el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, recuerda que los fundamentales de la economía se encuentran bien, resulta francamente ridícula la posición del presidente de la Concamin.

Recuerda el cuento de Pedro y el lobo. Este tipo lleva más de un año hablando de escalada de precios y exige rescate del gobierno. Ya es como para que hubiera aprendido.

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