Regresan los pactos de frente a inflación y Trump

Es difícil no comparar los pactos antiinflanarios de los ochenta y noventa, los de Solidaridad Económica, o el de Estabilidad y Crecimiento con el de ayer.

Otra vez en Los Pinos se habló de concertación, de solidaridad, de unidad entre gobierno y sectores productivos. El reto lo amerita: por delante tenemos enfrente una posible escalada inflacionaria por el gasolinazo, así como un riesgo por la llegada de Donald Trump por lo cual necesitamos fortalecer el mercado interno. Sí, otra vez regresaron los pactos.

PEÑA Y MEADE, EVITAR GASOLINA COMO PRETEXTO

El primer y principal orador fue el presidente Peña, quien insistió en la necesidad de elevar el precio de la gasolina, para evitar dirigir un subsidio al combustible en lugar de programas sociales, así como para permitir finanzas públicas más sanas.

Ahí fue donde José Antonio Meade, secretario de Hacienda, recordó la necesidad de obtener un superávit primario y dejar de endeudarse. Pero también recordó los problemas por venir: evitar la escalada de precios en la que se utilice el alza del precio de la gasolina como pretexto, así como el de traer medidas para apoyar a las pequeñas empresas, adultos mayores y a la población que utiliza el transporte público.

DEL PACTO POR MÉXICO AL ACUERDO

Desde luego, el acuerdo de ayer recordó al que Peña Nieto firmó desde su primer día como Presidente: el Pacto por México, que le permitió la negociación de las principales reformas como la energética, de telecomunicaciones, competencia y fiscal, entre otras. 

Ahora Peña Nieto encabezó ayer el Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar. Es una respuesta clara al malestar del aumento en el precio de la gasolina, pero también para responder a lo que viene con Donald Trump: intentos por llevarse inversiones e interrumpir parte del flujo comercial que tenemos con EU y que afectarían a toda la planta exportadora. Es hora de pensar en el mercado interno.

Fonadin y Nafin, al rescate

Meade detalló las medidas y los instrumentos del nuevo acuerdo:

-Fonadin, el Fideicomiso para Infraestructura que está a cargo de Banobras (Abraham Zamora) deberá buscar no cinco, sino 50 ciudades para apoyar el transporte público.

-La banca de desarrollo, principalmente Nafin (Jacques Rogozinski), debrá apoyar con 18 mil millones de pesos a proyectos productivos, sobre todo ahora que las tasas de interés aumentaron y los créditos bancarios son más caros.

IMSS POR MÁS; CONSAR TRAS ADULTOS MAYORES

-El Seguro Social (Mikel Arriola) deberá ampliar el número de guarderías así como mejorar el acceso de los trabajadores asegurados a sus prestaciones sociales.

- La Consar (Carlos Ramírez) junto con el Seguro Social, deberán revisar todo el cúmulo de pensiones pendientes, de personas que tienen depósitos en su pensión, pero no han podido recuperarlos. El monto es de 50 mil millones de pesos.

- Habrá por primera vez un apoyo a 3.5 millones de adultos mayores.

SCT: AEROPUERTO Y RED COMPARTIDA A TODO VAPOR

-SCT podrá continuar con las obras que ayudan al mercado interno, como son el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Y desde luego la Red Compartida (que este año deberá invertir ocho mil millones de pesos). Se trata de un proyecto para ofrecer internet y telefonía hasta los lugares más aislados del país y al final tiene un ganador, y según datos de Hacienda, sí se planea desplegar la red este mismo año. Además estarán las inversiones en puertos, aeropuertos, así como el programa de Escuelas al 100.

CARSTENS, EL AUSENTE

Nos llamó la atención una ausencia: Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, quien al tratarse de un pacto para combatir la inflación, fue extraño no verlo en Los Pinos.

Es cierto, el banco central es autónomo, quizá por eso no fue o… por su próxima salida en medio de la tormenta.

Recordemos que Carstens ha sido un muy buen banquero central, pero su salida en momentos en los que Trump llega a la Casa Blanca, no gustó del todo en el gobierno.