Las razones del Presidente

En un hecho inédito de la presente administración, Peña Nieto se reunió en el salón Presidentes de Los Pinos con una treintena de periodistas.

Ahí junto a sus secretarios de Hacienda, Energía y director de Pemex, tuvo una reunión abierta en la que buscó dejar en claro, que a diferencia de otros presidentes, como López Portillo o Felipe Calderón, él sí tomó la decisión de liberar el precio de la gasolina para no tener cargas fiscales que pesen sobre las finanzas públicas en un año complicado como 2017.

MENSAJE A AMLO EN REFINERÍAS

La reunión se aprovechó para enviar varios mensajes, uno de ellos fue a López Obrador, quien ha insistido en que se deberían construir más refinerías nacionales para no importar gasolina, y reducir su precio.

En ese momento, fue el turno del secretario de Hacienda, José Antonio Meade, quien sin mencionar por su nombre a López Obrador, sí recordó que el precio de las gasolinas depende del costo internacional de los combustibles, no de dónde se refinen. Y si bien aceptó que en balanza de pagos el contar con refinerías nacionales podría ayudar a no importar, sí desechó la idea de que las gasolinas serían más baratas por el simple hecho de producirlas en México, cuando dependen del costo del petróleo a nivel mundial.

CUARTOS CONSUMIDORES DE GASOLINA; ESTADOS SE LLEVAN TODO

El Presidente reveló un dato alarmante: México es el cuarto consumidor per cápita de gasolina en el mundo. En tono de broma por ahí se dijo que los mexicanos consumíamos refrescos, tequila y… gasolina.

El seguir subsidiando el precio de la gasolina hubiera costado más de 200 mil millones de pesos, que se irían a un subsidio regresivo (que apoya más a la población de mayores ingresos), en momentos cuando el presupuesto es sumamente ajustado.

El presupuesto es tan ajustado que, recordó, casi 40% se lo llevan los estados, entre participaciones y aportaciones, mientras que otro tanto se va en el pago de la deuda y de las pensiones a trabajadores de Pemex, CFE, IMSS e ISSSTE. De ahí que el poco margen presupuestal que queda, no se podía ir en subsidiar la gasolina, sino a invertir en desarrollo social, educación y salud.

SUAVIZARÁN GASOLINA CON EXCEDENTES, NO CON PRESUPUESTO

Peña Nieto está convencido de lo acertado de la decisión de liberar el precio de las gasolinas, pues no se podían utilizar más de 200 mil millones de pesos en subsidiar el combustible, máxime cuando el Presupuesto viene tan ajustado, en un año muy complicado.

Es un hecho que las agencias calificadoras están viendo a México, lo tienen en la mira para reducirle, si es necesario, su grado de inversión. De ahí que el presidente Peña y el secretario de Hacienda, recuerden que en la suavización del precio de las gasolinas, no se usarán recursos presupuestales. Se utilizarán recursos excedentes de los ingresos petroleros.

Este año el precio del petróleo se presupuestó en 42 dólares el barril, pero ya se cotiza en 45 dólares. Esos tres dólares de ingresos adicionales servirán para ir “suavizando” los vaivenes en el precio de la gasolina.

El precio de la gasolina empezará a depender de dos factores, el tipo de cambio y los precios internacionales del combustible importado. Y los ingresos petroleros ayudarán a evitar que el precio de la gasolina se mueva fuertemente, y sólo veremos cambios en su cotización en centavos.

CARSTENS, UN FACTOR MENOS DE INCERTIDUMBRE

En la reunión con periodistas se le cuestionó al presidente sobre la salida de Agustín Carstens. Fue cuando Peña Nieto reveló que le pidió al banquero central quedarse un poco más de tiempo, en momentos de altísima volatilidad cambiaria.

El banquero central aceptó, y en lugar de irse en julio, se irá hasta el 30 de noviembre al BIS, el Banco de Pagos Internacionales. Oportuna invitación y decisión del banquero central. Ya existía una fuerte crítica de que Carstens se iba en el peor momento. Con esto se tranquilizan las aguas, y el tema de sucesión de Carstens, por lo pronto, no será otro factor de incertidumbre.