Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

Maricarmen Cortés

23 Jul, 2013

Afores, ¿aún sin focos rojos?

Las afores fueron uno de los sectores más afectados por la volatilidad que se registró en los mercados financieros no sólo en México sino a nivel internacional en mayo y junio ante el temor —ya disipado por el propio Ben Bernanke— de una posible disminución antes de fin de año de los estímulos monetarios que inyecta la Fed a la economía de Estados Unidos, por 85 mil millones de dólares mensuales.

Un análisis de la casa de bolsa Accival de Banamex-Citi señala que los recursos en custodia de las afores cerraron en julio en 1.919 billones de pesos frente a 2.0 billones en abril, con una caída mensual en activos de 3.7% en junio y de 7.5% en el bimestre.

Las minusvalías del último bimestre sólo son superadas por las que se vivieron a fines de 2008 y principios de 2009 después de que estalló la crisis de los mercados subprime en Estados Unidos y también se registró una fuerte volatilidad en las bolsas y caída en los rendimientos de las siefores. Para apoyar a las afores las autoridades financieras pusieron en marcha entonces una serie de medidas de líneas de liquidez de corto plazo del Banco de México para la afores y swaps en tasas de interés

El presidente de la Consar, Carlos Ramírez, y Tonatiuh Rodríguez, director de Banorte XXI y vocero aún de la acéfala Amafore, insisten en señalar que no hay razón para preocuparse por la minusvalía que han registrado las cuatro siefores básicas del sistema porque se trata de inversiones de largo plazo y las siefores mantienen rendimientos muy superiores al de otros instrumentos del mercado.

A fin de que los trabajadores se acostumbren a ver los rendimientos de largo plazo y no se asusten en épocas de minusvalía, la Consar estableció que las siefores se evalúen de acuerdo con el Índice de Rendimiento Neto (IRN) de los últimos 50 meses.

Hasta el momento, no están encendidos focos rojos en el sistema de pensiones no sólo porque de acuerdo con el IRN, las siefores se mantienen como una muy buena opción, sino porque aún no están en edad de jubilarse los trabajadores que comenzaron a cotizar después de julio de 1997 cuando entró en vigor la nueva Ley del SAR, y se esperan mejores resultados al cierre de julio.

Afirme Bajío, con rendimientos reales negativos

Sin embargo, el análisis de Accival señala que la caída del IRN empieza a ser notable y presenta el rendimiento netos reales de las cuatro siefores básicas de los últimos 36 meses. Las siefores con menores rendimientos netos en todos los casos son Inbursa, Coppel y Afirme Bajío.

Lo que sorprende es que la única que registra rendimientos reales negativos es Afirme Bajío.  En la siefore 1, que agrupa a los trabajadores de 60 años y mayores, el rendimiento neto real promedio es de 2.33% pero el de Afirme Bajío es negativo de 0.37% seguido de Coppel con sólo 0.26% positivo.

En la siefore 2, para trabajadores entre 46 y 59 años, el rendimiento real neto es de 3.05% pero el de Afirme Bajío es negativo en 0.42% seguido por Inbursa con un rendimiento positivo de 1.24%.

En la siefore 3, para trabajadores ente 37 y 45 años, el rendimiento promedio neto real es de 3.36% y nuevamente Afirme Bajío e Inbursa son las dos más bajas con 0.24% y 1.78% respectivamente.

Y en la siefore 4, para trabajadores menores de 37 años el rendimiento promedio neto real es de 3.99% y nuevamente Afirme Bajío registra un rendimiento negativo de 0.01.

Desde luego sí hay preocupación en la Conar por los bajos rendimientos de Afirme Bajío y Coppel, aunque Inbursa por su elevada carta en instrumentos de corto plazo es la menos afectada por la volatilidad del último bimestre.

Apagón analógico: ¿se tendrá que cambiar la Constitución?

La decisión de la Cofetel de posponer seis meses la fecha del apagón analógico en la segunda etapa, al pasarla del 26 de noviembre al próximo 29 de mayo, plantea un reto enorme al nuevo Instituto Federal de Telecomunicaciones que sustituirá a la Cofetel y deberá comenzar a operar en septiembre.

La fecha para el apagón analógico a nivel nacional se mantiene el 31 de diciembre de 2015, pese al retraso de la segunda etapa, porque está ya plasmada en los cambios que se hicieron a la Constitución en la reforma de telecomunicaciones.

Al respecto, Gerardo Soria, presidente del IDET, no descarta que la realidad termine por ganarle a la Constitución y el problema es que sólo el Congreso podría cambiar la fecha del apagón analógico.

La clave, dice Soria, será el éxito en la entrega de decodificadores en la segunda etapa que incluye a Monterrey, Ciudad Juárez, Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros.

A partir de hoy saldré de vacaciones. Esta columna volverá a publicarse el 7 de agosto. Hasta entonces.