Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

Maricarmen Cortés

27 Ago, 2013

Toda la cadena azucarera vs. IEPS a refrescos

Bajo la batuta de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas, ANPRAC, que dirige Emilio Herrera, toda la cadena productiva del azúcar se unió en contra de un posible impuesto especial a la producción, IEPS. Hoy harán públicos sus argumentos en contra del gravamen en una conferencia de prensa en la que participarán los dirigentes de la ANPRAC; la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera; la Unión Nacional de Cañeros; el Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la República Mexicana (STIASRM) y la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes Plutarco Elías Calles (ANPEC).

Los industriales, con el apoyo de los trabajadores cañeros y de los comerciantes, inician así su cabildeo en contra del IEPS a una semana de que se presente el paquete económico de 2014 y la propuesta de reforma fiscal.

Desde luego, los industriales no quitan el dedo del renglón e insisten en que el consumo de refrescos no es la principal causa de la obesidad en México y consideran que el IEPS —que además se pretende aplicar incluso a los refrescos light— no ayudará a solucionar el problema de la obesidad en México, pero sí podría generar problemas a miles de familias que trabajan en forma directa o indirecta en la cadena del azúcar.

Los legisladores que defienden el IEPS a refrescos aseguran que habría una reducción de 25% en el consumo de refrescos y ayudaría a combatir la obesidad.

Los industriales señalan que se afectaría a toda la cadena porque la industria refresquera, con un valor de producción de más de 350 mil millones de pesos anuales en 15 estados de la República, representa 20% del consumo interno de azúcar, genera 540 mil empleos directos y más de tres millones indirectos.

Además, se afectaría también al pequeño comercio porque los refrescos representan entre 25 y 30% de sus ventas totales.

Se prevé, desde luego, que el consumo de refrescos disminuya en México en la medida en que los consumidores tengan cada vez más información sobre los riesgos de la obesidad y el consumo excesivo de azúcar.

Sin embargo, lo que espera la cadena productiva del azúcar es una baja gradual en el consumo de refrescos, que serán sustituidos por opciones más saludables, y el problema del IEPS serían las distorsiones que generaría en el mercado más el impacto en la inflación y en los bolsillos de los trabajadores de menores ingresos, que son los principales consumidores de refrescos.

Pemex, crítica a fondo a la Cofeco

Ya le habíamos anticipado que Pemex recurriría a una férrea defensa legal en contra de la multa por 653 millones de pesos que le impuso la semana pasada el Pleno de la Cofeco con los votos en contra de los comisionados Cristina Massa y Luis Ibarra, quien está en riesgo de no ser ratificado por el Senado para ser comisionado de la nueva Comisión Federal de Competencia Económica.

Lo que sorprendió fue la rudeza del comunicado de Pemex, que acusó a la Cofeco de “soslayar los más elementales postulados de derecho en nuestro marco legal vigente”, de atribuirse facultades de la Sener, CRE y Comisión Nacional de Hidrocarburos, de no conocer la Constitución y de no haber atendido las pruebas que presentó Pemex y que demuestran que sí es legal la exclusividad en la distribución y entrega de combustibles a las estaciones de servicio.

Lo que no dice Pemex es que la resolución de la Cofeco se presentó dos años después de que un grupo de gasolineros presentó una denuncia formal en contra de la paraestatal por modificar su contrato de franquicia y prohibirles que utilicen sus propias pipas para transportar el combustible a las estaciones de servicio, lo que se tradujo en pérdidas.

En Pemex están más que enojados por la multa que, como ya le dijimos, le tocará resolver a la nueva Junta de Gobierno de la CFCE.

Pérez Motta, menor subsidio a la gasolina

Por su parte, Eduardo Pérez Motta, presidente de la Cofeco, asegura que las gasolinerías pagan un sobrecosto que se estima en mil millones de pesos al año y al exigir a Pemex en un plazo de 30 días a terminar con la obligación de que el combustible sea trasladado por pipas operadas por personal sindicalizado, habrá una disminución en el subsidio a la gasolina.

Además, Pérez Motta trabaja a marchas forzadas para concluir con los cambios administrativos en la Cofeco, ya que con la nueva ley dejará de ser un órgano desconcentrado y tendrá más autonomía.

Y antes de concluir su gestión, Pérez Motta publicó el libro La política de Competencia en el umbral de la consolidación, con muy interesantes artículos de los comisionados de la Cofeco, a 20 años de su creación, y de empresarios como Lorenzo Zambrano, José Antonio Fernández y Gerardo Gutiérrez Candiani.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube