¿Subcuenta de vivienda, para ahorro obligatorio?

Definitivamente, el presidente Enrique Peña Nieto no enviará al Congreso en este periodo ordinario ninguna iniciativa para modificar la Ley de los Sistemas de Ahorro para el retiro que contemple un incremento en las cuotas de ahorro obligatorio que hoy son de sólo 6.5% del salario mensual del trabajador, y son las más bajas entre los países miembros de la OCDE.

Sí hay en el sector privado y entre las autoridades financieras una gran preocupación porque el ahorro obligatorio es, totalmente, insuficiente para los primeros trabajadores que comiencen a jubilarse bajo la ley actual de 1997 que dio origen a las Afore.

En promedio se estima que de no incrementar en forma sustancial su ahorro voluntario los trabajadores se jubilarán con el 30% de su último sueldo lo que no les alcanzará para una pensión digna a la gran mayoría de los trabajadores mexicanos que tienen hoy un ingreso mensual inferior a los 6 salarios mínimos.

Las manifestaciones en Chile por las bajas pensiones de los trabajadores que se están ya jubilando con el sistema de cuentas individualizadas, prendió los focos amarrillos en México, pero el problema es que elevar el ahorro obligatorio hasta alcanzar el 12% del salario implicaría un elevado costo para las empresas y para los propios trabajadores, incluso, si se incrementa gradualmente cada año como propuso Carlos Noriega, el presidente de la Amafore.

Lo interesante es que ya el sector privado presentó una propuesta que está hoy analizando el secretario de Hacienda, Luis Videgaray para utilizar parte de la Subcuenta de Vivienda para reforzar el ahorro obligatorio. Actualmente, las cuotas patronales al Infonavit representan el cinco por ciento del salario y lo que se propone es destinar recursos de esta subcuenta para que sean aplicados a la jubilación de los trabajadores.

El problema es que para que esta propuesta avance se requiere no sólo de la aprobación de los representantes de los trabajadores que participan en el Infonavit, que es un organismo tripartito, sino  también de los partidos de oposición porque sería un cambio legal que tendría que ser aprobado en el Congreso.  La propuesta se presentará sólo si ven condiciones políticas para que salga adelante sin que se politice y el problema es que se prevé que la negociación del paquete económico y fiscal para 2017 será muy compleja por el ajuste al gasto público y el superávit primario que presentará Videgaray.  Y a partir del año próximo los consensos serán aún más complicados por la grilla electoral.

WESTERN UNION, DUPLICA PRESENCIA EN MÉXICO.

Son las tres prioridades que tiene Rodrigo García Estebarena, director de Western Union México: duplicar la red de pagos para cerrar en 28 mil puntos; avanzar en el segmento digital que hoy representa menos del 3% del negocio; y mantener el crecimiento del negocio a un ritmo mayor al del mercado.

The Western Union Company opera hoy en más de 200 países con un total de 16 mil corredores en todo el mundo que son los puntos de envíos de remesas entre dos ciudades. Aunque India es con mucho el líder en recepción de remesas a nivel mundial, con más de 80 mil millones de dólares anuales, seguido de China con 70 mil  mdd y Filipinas con 50 mil mdd, el corredor más grande para Western Union es, sin lugar a dudas, Estados Unidos a México, con más de 8.5 millones de transacciones con un promedio por envío de 285 dólares.

La diferencia frente a India, China, Filipinas que superan en volumen de remesas a México, es que los envíos proceden de distintos países o corredores mientras que en el caso de México la gran mayoría, más del 85% procede de Estados Unidos que es la razón por la cual es el más grande del mundo.

Western Union opera en México con tres licencias o marcas, supervisadas y autorizadas por la CNBV; Western Union, Vigo y OrlandiValutta y dice, García Estebarena compiten en uno de los mercados más reñidos en el sector porque hay 60 empresas en Estados Unidos que envían remesas a México y 45 en México autorizadas para el pago de remesas.

Desde luego la prioridad en materia de supervisión para la CNBV es la infraestructura en materia de prevención de lavado de dinero y terrorismo.